En San Miguel del Monte, el reconocimiento como comunidad indígena impulsa la creación de los Guardianes del Agua para proteger sus recursos hídricos.
Morelia, Michoacán.- La concesión sobre el usufructo del agua que otorgó la Comisión Nacional del Agua (Conagua) a la empresa comercializador Bicentenario desde enero de 2023 y el reconocimiento como comunidad indígena a la Tenencia de San Miguel del Monte este 17 de septiembre, han desatado que los habitantes emprendan diversas acciones, entre ellas la revocación de la concesión, la destitución del Jefe de Tenencia y amparados en el reconocimiento indígena, la creación de la figura operativa de Guardianes del Agua, un comité comunal con el que se pretende evitar el saqueo del manantial La Mina ubicado al Sur de Morelia y sobre el que pesa la concesión.
En conferencia de prensa y acompañado de liderazgos del Consejo Supremo Indígena de Michoacán, Hugo Ramón Velázquez Hernández, presidente del Comité del Agua de San Miguel del Monte y quien impulsa la solicitud de la comunidad para constituirse como autogobierno, explicó que pese a las movilizaciones que han llevado a cabo, éstas no se han reflejado en denuncias penales en contra de quienes considera, están robando el agua del manantial La Mina.
Contrario a ello, relató el arribo a la comunidad de “40 camionetas” pertenecientes a diversas instituciones, como la Fiscalía General de la República (FGR), la Fiscalía General del Estado (FGE) y de Seguridad Pública el pasado jueves 5 de septiembre, todas ellas con la intención de detener a comuneros de San Miguel y realizar cateos a diversos inmuebles, persecución desatada por la manifestación y el bloqueo emprendido en el predio donde se ubica la toma concesionada a la empresa Bicentenario.
Velázquez detalló además, que dicha persecución judicial tiene que ver con la solicitud de revocación que la comunidad interpuso desde hace tres meses ante la Conagua respecto de la concesión que obtuvo por diez años, Miguel Ángel Prado, de la empresa Bicentenario el 30 de enero de 2023, diligencia que a más tardar deberá resolverse en un mes.
Para el presidente del Comité del Agua, San Miguel del Monte tiene más de 500 años cuidando y aprovechando los beneficios del bosque, entre ellos la explotación del arbolado que ellos mismos cuidan, sin que por ello sean catalogados como talamontes, así como del agua que se produce y que surte a la ciudad capital, lo que les permite ser los guardianes de ese usufructo y no la Conagua.
Raymundo Ortiz Martín del Campo, abogado del CSIM, detalló en entrevista que la concesión otorgada por la Conagua a la empresa Bicentenario, tiene como antecedente otra concesión otorgada en 2016 para uso doméstico, y no para la venta del líquido a través de pipas.
“Eso es una felonía, que a una comunidad no se le otorgue una concesión para uso doméstico cuando la Ley Nacional de Aguas dice que el uso doméstico es prioritario sobre el comercial respecto del mismo yacimiento y no solo eso, va Fiscalía y rompe el tuvo y pone sellos para que la comunidad no tenga acceso a ese líquido”.
Ortiz explicó que la Ley mandata a la Conagua a regularizar todas las tomas de uso doméstico, máxime si son de comunidades indígenas, pero la Comisión nunca hizo eso en el caso de San Miguel del Monte y ahora resulta que la Fiscalía del Estado hace un recorrido por la zona y clausura la toma con la que se surtía la comunidad, afectando directamente a unas 600 familias de San Miguel del Monte, así como a unas 200 de las comunidades de Agua Zarca y Río Bello.