Para comenzar este escrito, desearía exponer cómo se podría considerar la geopolítica de manera general, es decir, deseo plantearla como el estudio de las características territoriales, marítimas, aéreas, riquezas naturales y posición geográfica que influyen en la toma de decisiones políticas, económicas, sociales y culturales.
Decisiones que impactan en la vida y en la dinámica de los hechos sociales en los pueblos, los estados y las naciones; Decisiones que se pueden utilizar de manera estratégica de acuerdo a los dominios territoriales.
En el caso de nuestro País, podría ser importante analizar la riqueza natural, las características marítimas, aéreas y sobre todo la posición geografía tan importante que ocupa a nivel mundial.
Así mismo, se podría plantear la posición de México a nivel continente Americano, es decir, pensar lo importante que es estar justo en medio de centro y sur américa, en su conexión con el País de mayores índices de consumo y endeudamiento global, los Estados Unidos de Norte América y con ello plantear todo lo que tiene que transitar cruzando el territorio mexicano, desde los diferentes países latinoamericanos para que pueda ser consumido por el País del norte del continente.
En ese sentido, se podría visualizar o dibujar un escenario en el continente Americano que a pocos poderosos les agradaría; es decir, reconocer un País en el norte del continente dependiente de las riquezas naturales de toda América Latina, pero aparte un País dependiente del tránsito que necesariamente tiene que ocurrir por México; ante dicho escenario América Latina y en este caso México tiene un poder Geopolítico enorme en el continente y en el mundo.
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Por otro lado, agregado a la posición que México tiene en el continente americano, se puede analizar la conexión de México con el mundo a partir de sus puertos y mares por los distintos océanos del Pacifico y del Atlántico; posición que conecta a nuestro País con China, Hong Kong, Corea, Japón, Malasia, Taiwán e Indonesia, Nueva Zelanda y Oceanía; así como con Costa Rica, Honduras, y Chile, agregado a Francia, Italia, España, Marruecos, Argelia, por mencionar solo algunos.
De tal manera, que asumiendo dicha potencialidad Geopolítica de México, se publicó en el Diario Oficial de la Federación (DOF), el día 4 de Agosto de 2020, el Programa Regional “Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec”.
En dicha publicación del DOF, se expone lo valioso que será la conclusión de dicho corredor interoceánico; por citar tan solo algunas características, se puede exponer la combinación de diversos medios de comunicación como pueden ser; marítimos, férreos, carreteros y aéreos que atravesarán el país para conectar prácticamente a todos los continentes, con ello se busca fortalecer el mercado interno y externo con la premisa fundamental que “el mercado no sustituye al Estado”.
En el corredor, se toma como una de las principales características ahorrar tiempo de traslado de las distintas mercancías, mismas que principalmente se encuentran en los puertos de Coatzacoalcos y Salina cruz, durando en la actualidad aproximadamente en tren, un tiempo de 8 horas con 9 minutos, teniendo una velocidad por tren de 38.8 km/h.
Agregado a ello, cabe mencionar las 2 de las 6 refinarías existentes en el País que se encuentran el en Istmo, en donde entre ambas producen el 33.4% de la refinación a nivel nacional.
Por lo tanto, se prevé que con el corredor interoceánico por un lado de impulsará el desarrollo económico de la región, el desarrollo en infraestructura, el intercambio de ciencia y tecnología, así como el desarrollo y fortalecimiento cultural de los pueblos indígenas y afromexicanos que se encuentran en dicha región; y por otro lado, México a nivel mundial tomará y fortalecerá su posición Geopolítica estratégica, misma que le dará la posibilidad de incidir en la toma de decisiones políticas internacionales inicialmente en el aspecto económico.
Así que agregado a la defensa de los recursos naturales, minerales, energéticos que se ha hecho en este periodo, y a la defensa de la soberanía nacional, en suma con la estrategia geopolítica, puede ser que México tome una posición importantísima a nivel global.