El fallecimiento del papa Francisco a los 88 años marca el fin de un papado reformador que dejó una huella profunda en la Iglesia Católica.
La comunidad católica enfrenta una pérdida significativa: el papa Francisco ha fallecido a los 88 años en su residencia de la Casa Santa Marta, en el Vaticano. Jorge Mario Bergoglio, el primer papa latinoamericano y miembro de la orden jesuita, dejó una huella indeleble en la Iglesia Católica desde su elección el 13 de marzo de 2013, sucediendo al papa Benedicto XVI. Este domingo aún había celebrado su última misa de Pascua.
Complicaciones de salud y últimos días
En los últimos meses, la salud del papa Francisco se deterioró considerablemente. Fue hospitalizado varias veces debido a problemas respiratorios, incluyendo una doble neumonía que puso en peligro su vida.
En total, estuvo 38 días ingresado en el Hospital Gemelli de Roma, donde recibió cuidados intensivos y terapias de rehabilitación. A pesar de su frágil estado, continuó realizando algunas apariciones públicas, mostrando su fortaleza y dedicación al servicio pastoral.
Ceremonias fúnebres
La Santa Sede anunció que el cuerpo del papa Francisco será expuesto en la Basílica de San Pedro para que los fieles puedan rendirle homenaje. La misa fúnebre se celebrará en la Plaza de San Pedro, presidida por el decano del Colegio Cardenalicio. En línea con las reformas que él mismo impulsó en 2024, el rito será más sencillo, omitiendo símbolos tradicionales como el uso de tres ataúdes. Francisco expresó su deseo de ser enterrado en la Basílica de Santa María la Mayor en Roma, un lugar de gran significado personal para él.
Cambios y controversias en su liderazgo
El papado de Francisco se distinguió por sus iniciativas audaces y decisiones que generaron tanto apoyo como controversia. Promovió la participación femenina en roles de liderazgo, expresó opiniones abiertas sobre el matrimonio igualitario y el divorcio, y fomentó una Iglesia más cercana a los sectores marginados. Estas posturas, aunque valoradas por muchos, también encontraron resistencia en las alas conservadoras de la institución.
Vida y trayectoria eclesiástica
Nacido el 17 de diciembre de 1936 en Buenos Aires, Argentina, Bergoglio estudió química antes de ingresar a la Compañía de Jesús en 1958 como novicio. Durante la dictadura militar en Argentina, se destacó por su compromiso con los derechos humanos y el apoyo a los perseguidos. En 1992, fue nombrado Arzobispo de Buenos Aires, centrando su labor en la asistencia a los más vulnerables.
Su elección como papa
En el cónclave de 2013, Bergoglio fue elegido como el papa número 266 de la Iglesia Católica, adoptando el nombre de Francisco en honor a San Francisco de Asís. Su nombramiento fue un evento sin precedentes: el primer papa no europeo desde Gregorio III y el primero nacido en América Latina.
El legado del papa Francisco será recordado como el de un líder que construyó puentes entre la tradición y la renovación, un reformador decidido a transformar la Iglesia desde sus cimientos para alinearla con las realidades del siglo XXI. Que descanse en paz.