Planificación nacional de Joe Biden para la reducción y reciclaje del desperdicio de alimentos.
La administración de Joe Biden ha revelado su estrategia para disminuir el desperdicio alimentario; el miércoles 12 de junio, se presentó la ‘estrategia nacional para reducir la pérdida y el desperdicio de alimentos y reciclar orgánicos’.
Este plan contribuirá al compromiso de Estados Unidos de disminuir a la mitad el desperdicio de alimentos para 2030.
El enfoque del plan es la mitigación de las emisiones de gases de invernadero y la promoción del ahorro económico tanto en hogares como en empresas.
Las medidas propuestas en el documento pretenden generar entornos más saludables mediante la minimización de la pérdida y el desecho de alimentos.
La Estrategia de Reducción en el Desperdicio de Alimentos
La estrategia es fruto de más de 10 mil opiniones recabadas durante la consulta pública del 5 de diciembre de 2023 al 3 de febrero de 2024.
Contempla cuatro metas principales: la prevención de la pérdida alimentaria, la disminución del desperdicio de estos, el aumento del reciclaje de desechos orgánicos y el respaldo a políticas que promuevan estas prácticas.
Tom Vilsack, titular del departamento de agricultura (USDA), señaló el compromiso de su departamento para ‘reducir la pérdida y el desperdicio de alimentos, facilitando muchos programas y actividades para ayudar a los agricultores, productores, comunidades y empresas’.
Según Vilsack, la estrategia ‘traza un rumbo para reducir la pérdida y el desperdicio de alimentos en nuestro país en un 50% para 2030, y estoy orgulloso de las acciones delineadas para el USDA y nuestros socios federales.
Todos tenemos un papel que desempeñar en la reducción de la pérdida y el desperdicio de alimentos, y esperamos que estos compromisos federales inspiren y catalicen acciones en el sector privado y las comunidades de todo Estados Unidos’.
El USDA priorizará la asignación de 2.5 millones de dólares del Instituto Nacional de Alimentación y Agricultura (NIFA) para estudiar la eficacia de distintos mensajes dirigidos a los consumidores que promuevan la reducción del desperdicio alimentario.
También se destinarán fondos a un nuevo Centro NIFA de 1.5 millones para la investigación sobre la economía del comportamiento relacionada con la pérdida y el desperdicio de alimentos, así como a la financiación de nuevas tecnologías de envasado y variedades de cultivos que extiendan la vida útil de los alimentos.