Casi definido el armado de quienes serán los abanderados para el ejercicio electoral del 2024, falta concretar los espacios legislativos o, mejor dicho, lo nombres de los candidatos a integrar la fórmula del senado, lo mismo que los distritos locales y federales, sin olvidar que, los ayuntamientos, son parte del esquema estratégico. Estamos hablando de cientos de puestos de elección popular que estarán en juego para Morena. Se sabe que, para ello, el método de elección será el que viene implícito en los estatutos del partido, sin embargo, se puede privilegiar la negociación y el consenso para equilibrar la balanza.
O sea, estamos hablando de miles de propuestas que, para el caso, han levantado la mano en el estado de Michoacán. Lo que podemos decir, luego de lo que ha acontecido últimamente, es que la democracia ha sentado un precedente importante en el lopezobradorismo. Claudia Sheinbaum, por ejemplo, ganó con ventaja la encuesta interna; en ese mismo sentido, los nueve coordinadores de las entidades federativas, por justicia social y por paridad de género, son merecedores (as) del nombramiento. Eso hace que, de entrada, la unidad sea un elemento clave para apuntalar el proceso electoral.
Tenemos muy claro que, de manera contundente, Morena es el gran favorito en Michoacán. Por esa razón, tendrá que seleccionar aquellos perfiles que, a la postre, le garanticen votos y arrastre entre la población civil. En efecto, muchos han hecho el intento por posicionarse en el mapa preelectoral. Se vale. La democracia participativa debe abrir el compás, especialmente cuando contribuyen a elaborar propuestas que fortalezcan el proceso de transformación. Incluso, esta coyuntura se ha ido marcando por cuadros que, de forma sólida, están totalmente consagrados como líderes en la entidad.
Es muy probable que- para la fórmula del Senado- la integren Carlos Torres Piña y Giulianna Bugarini. Ambos, en ese sentido, son los perfiles mejor posicionados en la geografía del estado. Por ello, se espera que, con gran legitimidad, se impongan en el mecanismo que aplique el partido. Incluso, después de atestiguar la respuesta tan contundente que han tenido, en esta fase clave para constituir comités de apoyo a favor de Claudia, se ha notado el respaldo para que, uno y otro, sean los representantes del lopezobradorismo para la Cámara Alta.
Su paso, además de contundente, tiene buena respuesta y aceptación para Giulianna Bugarini y Carlos Torres Piña. Y, de la misma forma, en ese relevo generacional apuntalan cuadros muy jóvenes que, por mucho, están en plenitud para competir en puestos claves. Es el caso de José Antonio Medina García, que contenderá en la interna por el distrito de Apatzingán. De hecho, durante mucho tiempo se ha mantenido activo en los ambientes políticos. Fue presidente municipal de Chinicuila y, con esas credenciales, Alfredo Ramírez Bedolla lo sumó como funcionario público de primer nivel.
Todo indica que, para ese proceso, José Antonio Medina García, aspirante a la diputación, es el gran favorito para llegar a San Lázaro. La presente circunstancia implica que se intensificarán los recortes en la administración estatal, ya que numerosos funcionarios- de primer nivel- como el caso de Toño, emigrarán a otras áreas para fortalecer las políticas públicas de la 4T.
A propósito, quien también no quitará el dedo en el renglón para apuntalar sus intenciones por reelegirse, es el presidente municipal de Pátzcuaro, Julio Arreola. Dados los altos índices de aprobación que tiene en sus manos, es obvio que tiene interés en buscar nuevamente la administración municipal. De hecho, en la medida que se asoman los nombres, y una vez que la convocatoria interna de Morena abrió el compás para la inscripción, es muy probable que Arreola, con la gran cercanía que mantiene con el gobernador constitucional de Michoacán, se apuntará para el ejercicio interno y continuar, como viene apuntalando el trabajo, con más acciones de beneficio social. Incluso, se especula que ese hecho tendrá lugar dentro de muy pronto, pues el edil, cobijado por la mayoría de la población civil, tiene fuerza política y, de paso, una estructura consolidada en toda la región.
Ingresa a: En la antesala de la reelección
Y Julio Arreola, una vez transcurrido más de dos años de su gestión, tiene todas las condiciones para llegar nuevamente a la administración pública municipal. O sea, se ve venir esa coyuntura que, para el caso, allana más el camino con la enorme aprobación que Arreola ha mantenido en los últimos meses. Bien puede, sin contratiempos, ganar la elección que se avecina el próximo año y, con eso, seguir haciendo historia como uno de los alcaldes que, de manera contundente, ha sentado un precedente significativo en el devenir político de Pátzcuaro.
Los comentarios de la columna opinión son responsabilidad de quien la firma y no necesariamente reflejan la postura editorial de contramuro.com