Andrés Manuel prometió ayer doble pensión para los viejitos, beca de dos mil 400 mensuales para 30 mil universitarios de escasos recursos, contratos de tres mil 600 pesos para los ninis; pensión para los discapacitados, un campo sin pobres, acceso gratuito a internet en hospitales, escuelas, plazas públicas y edificios del gobierno.
Y todo sin aumentar impuestos ni endeudar al país.
¡Casi el paraíso!, diría Luis Spota.
Ya me iba fascinado de la casa de Córdoba 170, en la Roma, donde El Peje registró su solicitud como candidato presidencial de Morena, pero me acordé de los cómos y me topé con la realidad.
El Peje pretende financiar un proyecto que no tiene ni Suiza con los ahorros derivados del combate a la corrupción y con la supresión de los gastos suntuarios.
Prometió, además, acabar con la importación de gasolinas, modernizar las seis refinerías existentes y construir otras dos.
La descentralización del gobierno federal que propone le llevó parte de su intervención.
Quiere llevar la Función Publica a Querétaro, Turismo a Chetumal, la SCT a San Luis Potosí, Economía a Monterrey, Salud a Acapulco, Educación Pública a Puebla, Cultura a Tlaxcala, Sedesol a Oaxaca, Sedatu a Pachuca, Medio Ambiente a Mérida, Pemex a Ciudad del Carmen, Energía a Villahermosa y un largo etcétera…
Las únicas que permanecerían en la Ciudad de México serían Hacienda, Relaciones Exteriores, Defensa, Marina y Gobernación.
“Habrá apoyos y facilidades para que los trabajadores al servicio del Estado puedan mudar su lugar de residencia”, prometió el moreno.
No tengo idea del número de burócratas que tendrían que salir de la Ciudad de México, pero mover todo el aparato de gobierno parece una tarea muy cara y nada fácil.
López Obrador no quita el dedo de renglón. Hará una consulta sobre la amnistía a “infractores que opten por su reinserción” en aras de recuperar la paz.
- El citado registro marcó la reaparición de Ricardo Monreal en un acto con el precandidato de Morena. La presidente de ese partido ya es Yeidckol Polevnsky.
El zacatecano deja hoy de ser delegado en la Cuauhtémoc. Se va a dedicar de tiempo completo a “hacer ganar” a Morena. Frente a las grabadoras promete incluso ayudar a Claudia Sheinbaum, la misma que ganó la encuesta patito para elegir candidato a la Jefatura de Gobierno.
El sucesor de Ricardo en la delegación será designado por la Asamblea Legislativa, a propuesta del jefe de Gobierno, Miguel Mancera.
Monreal nos dejó claro que no va a la presidencia de Morena ni quiere un cargo en el gabinete de Andrés, en caso victoria. Lo que sí evalúa es ir al Congreso.
No dijo si como senador o como diputado.
- Otro que asegura que no va a ser candidato “a nada” es el perredista Jesús Ortega.
Al igual que Monreal con Morena, Chucho se va a sacrificar por “el triunfo del Frente” en las elecciones del primero de julio próximo. En charla de banqueta, nos dijo también que siete de las nueve gubernaturas que se disputarán el primero de julio próximo ya están “sigladas”.
Tres van para el PAN, otras tres para el PRD, no especificó cuáles. Una, Jalisco, va para el MC. Chiapas y Yucatán no han sido “sigladas” todavía.
Las negociaciones han arrojado que aproximadamente 150 de las 300 candidaturas a diputados van para los azules; 110, para los amarillos, y 40, para el MC.
A Chucho le expusimos nuestras dudas sobre el proceso de elección del candidato del Frente a la Jefatura de Gobierno.
Mancera dio luz verde para que se registraran, además de Alejandra Barrales, el secretario de Desarrollo Económico, Salomón Chertorivski, y el doctor Armando Ahued, secretario de Salud y padre de Médico en tu Casa.
Los tres están identificados como manceristas. Se sabe, sin embargo, que Alejandra Barrales no está en los mejores términos con el jefe de Gobierno, quien lamentó que el proceso para elegir a los candidatos del Frente no hubiese sido democrático.
“A lo mejor los dejó correr para ver cuál es el mejor candidato”, respondió.
- Dice el refrán que del plato a la boca se cae la sopa. Es lo que pasó con la elección del auditor superior de la Federación. De la terna que integran Arturo Orcí, David Colmenares y Ángel Trinidad Zaldívar iba a salir este martes el sucesor de Juan Manuel Portal.
Pero nos dicen que, de un momento a otro, el PAN cambió su postura, por instrucciones del presidente interino del partido, Damián Zepeda. El pretexto fue que hay que escuchar a la sociedad civil.
El viraje provocó irritación en el coordinador de los diputados del PRI, César Camacho. Escribió en su cuenta de Twitter. “Carentes de profesionalismo y faltos de seriedad @diputadospan deshonran sus compromisos echándose para atrás e incumpliendo su obligación, al dejar de respaldar sus votos emitidos en comisiones”.
El tema del auditor se pasó a la sesión del jueves, nos dijo Jesús Zambrano, diputado del PRD. No hay certeza de que para ese día haya acuerdos.
La postura del PAN molestó también a Morena. Su coordinadora, Rocío Nahle, advirtió a los azules que si buscan “fiscal a modo” se van a quedar con las ganas. “Morena no va a votar por ninguna persona que no esté en esta terna”, dijo.
Por cierto que Alfonso Camacho, vocero del coordinador de la bancada del PRI, nos aclara el motivo de la salida, el lunes, de César Camacho del acto donde el PVEM lanzó a Meade como precandidato presidencial.
Jura que tiene que ver con el compromiso de firmar con la UNAM un convenio de colaboración sobre doctorado en derecho, y no con el hecho de que lo sentaron junto al incómodo diputado chiapaneco del PVEM, Eduardo Ramírez. Mandó fotos del acto con el rector Enrique Graue.