Morelia, Michoacán.- En México es cada vez más común ver a mujeres que se desarrollan plenamente en la vida laboral, sin embargo aún hay comunidades en las que por costumbres y/o usos, la participación de la mujer en la vida pública es todavía limitada.
En Michoacán, toman fuerza para desempeñar labores que se creían exclusivas de los hombres, o bien para asumir cargos que anteriormente solo podían ser ocupados por varones. El papel de las mujeres ha evolucionado y justamente ese fue el tema a tratar en un panel en donde tres féminas expusieron su experiencia en diversos aspectos.
Mariana Sosa Olmeda, rectora de la Universidad Latina de América (UNLA), fue enfática en el panel al señalar que ella particularmente está en contra de que se pida “igualdad” entre hombres y mujeres, las razones:
“Es un error pedir igualdad entre las mujeres y los hombres, porque simplemente no somos iguales. Ellos nunca van a sentir un cólico menstrual en la oficina, nunca van a sentir un asco, una náusea, nunca se les va a romper la fuente en su espacio de trabajo”, argumentó.
Y es que Sosa Olmeda, refirió que la palabra correcta es “equidad” pues es así como se puede sentir empatía por los procesos que las mujeres atraviesan y además, en las oportunidades de estudio y laborales y familiares. Y dijo estar segura de que cualquier mujer que lo desee y tenga sueños de “autorrealización”, lo puede lograr.
María Soto Romero, delegada del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), expuso que para ella -a diferencia de las otras dos panelistas- fue más complicado el hecho de poder estudiar, inicialmente entró tarde a la primaria (de nueve años) y como muchas antes y ahora, la negativa de su padre a que continuará su educación por falta de recursos económicos.
“Me dijo: ya sabes leer y escribir, hasta ahí llegó”, platicó al momento de decir que ella externó a su padre su deseo de seguir estudiando y gracias a que fue una niña con calificaciones de excelencia, sus profesores la apoyaron en sus sueños de superación y logró ser de las primeras mujeres en llegar al servicio médico público administrativo, ahora, delegada de una de las dependencias de salud más importantes de México.
Para Omega Vázquez Reyes, directora del Colegio de Morelia, la equidad y participación de los hombres en la vida diaria de una mujer (que tenga pareja), es fundamental, pues señaló que todavía existen las familias en donde solo la mujer es responsable de los hijos, además de que debe aportar económicamente a los gastos del hogar, ser ama de casa y esposa.
En cuanto al tema laboral, exigió que las mujeres puedan ir “seguras y no valientes”, es decir, sin problemas de acoso, sin tener que mostrar tal vez su peor cara o mal carácter para no ser confundida o víctima de acoso. “Que haya un vientre laboral armonioso donde no se confunda la amabilidad un coquetería”.
Las tres mujeres que desde abajo han construido éxitos laborales y personales, coincidieron en que para una mujer que desea superarse es posible, “complicado en ocasiones -no en todas- pero es posible”. Y mencionaron que se va trazando la ruta para que haya una equidad en todos los aspectos entre mujeres y hombres.