Enrique Guzmán se resguarda de los medios ante controversia familiar y comentarios raciales.
Ciudad de México.-El reconocido cantante Enrique Guzmán ha sido el centro de una reciente controversia debido a sus declaraciones que han sido interpretadas como racistas hacia Apolo, el hijo de Mayela Laguna y su exyerno Luis Enrique Guzmán. El conflicto surgió tras la revelación de que Apolo no sería descendiente biológico de Luis Enrique.
Mientras Luis Enrique espera los resultados de una prueba de ADN para confirmar sus afirmaciones, Enrique Guzmán ha respaldado a su hijo y ha generado revuelo al cuestionar el parentesco con el menor con términos como “negrito y chinito”, lo que ha causado un alboroto en las redes sociales.
Recientemente, en una aparición en el aeropuerto de la Ciudad de México, Enrique Guzmán, de 81 años, se mostró reacio a dialogar con los medios.
“Por favor, que ya no me molestes, ya no quiero decir nada, no quiero hablar con ustedes (…) ya no quiero hablar con ustedes, ¿quedó claro? (…) no tengo ganas de hacer declaraciones, que no puedo hablar sobre lo del niño”.
Enrique Guzmán, cantante
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Los periodistas no cesaron en su intento por obtener más detalles, incluso mencionando la confirmación de Alejandra Guzmán sobre la desheredación del hijo de Laguna, a lo que Enrique respondió.
“¿No sabías?… lo que diga Alejandra Guzmán, yo no sé, no tengo idea, por favor no me atores con eso, a ustedes ya no los soporto”.
Enrique Guzmán, cantante
Enrique Guzmán enfatizó su imposibilidad de hablar sobre el tema por órdenes judiciales, mostrando su descontento con el interés de la prensa:
“Sobre de eso yo no puedo ni siquiera, por órdenes del juez, ni siquiera hablar con ustedes de eso… ¿tú tienes bien lo odios?, acabo de decir que no puedo hablar, por favor, no me gusta su forma de interesarse en mí, no me interesa hablar con ustedes”.
Enrique Guzmán, cantante
Además, el cantante evitó preguntas sobre Pablo Moctezuma, la expareja de Alejandra y padre de Frida Sofía, quien recientemente tildó a Enrique de “viejo decrépito y cochino”. Enrique sugirió hablar directamente con Pablo, y ante la insistencia de la prensa, simplemente dijo: “¡Ay!, ¡qué bueno!, entonces hablen con él”.
En cuanto a las supuestas acusaciones de fraude contra Moctezuma, Enrique concluyó: “yo qué sé mi hijita, no tengo idea, no sé de qué hablas”.