En México cerca de 32 millones de llantas se desechan al año conforme a datos contenidos en una iniciativa promovida por Jesús Hernández
Morelia, Michoacán.-En México cerca de 32 millones de llantas se desechan al año, por lo que se estima que cerca de 300 millones de neumáticos permanecen en desecho actualmente en el país.
Lo anterior conforme a datos contenidos en una iniciativa promovida por el diputado Jesús Hernández Peña en el Congreso, que prevé reformar la Ley para la Prevención y Gestión Integral de Residuos en el Estado, a fin de establecer y autorizar la operación de centros de acopio y de reciclaje de llantas o neumáticos en Michoacán.
En la exposición de motivos de su iniciativa, el legislador habla sobre el cambio climático, los objetivos de la agenda 2030 en materia ambiental y las conductas de una inadecuada gestión de residuos, ya sea por falta de legislación o por el incumplimiento de la normativa existente.
De la legislación michoacana, en particular de la Ley para la Prevención y Gestión Integral de Residuos en el Estado, expone que se tiene pendiente lo relativo a mecanismos y estrategias que nos permitan mejorar la gestión, de forma específica, de las llantas y/o neumáticos, residuos que ocasionan contaminación muy grave, además de efectos dañinos en la salud de las personas, provocando enfermedades como el cáncer.
“Las llantas están conformadas en un 70% por caucho, las convierte en desechos que podemos considerar casi indestructibles”.
Aludiendo a una investigación de Emissions Analytics, Jesús Hernández apunta que una llanta de automóvil contamina más que un motor de combustión interna: la emisión de desgaste de las llantas es mil 850 veces mayor que las emisiones de masa de partículas del tubo de escape; situación que nos hace conocer lo incontrolable que puede resultar la contaminación de los neumáticos de los vehículos.
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“La adecuada gestión de llantas y/o neumáticos, a través de su adecuado acopio, manejo, reciclaje y disposición final, traería como consecuencia, no sólo su transformación en productos con vida duradera con materiales resistentes, si no el fomento de actividades productivas y económicas que crearían nuevos empleos que, a su vez, colaborarían en la contención del cambio climático”, apunta.