Christián Gutiérrez.
Este año 2022 habrá elecciones para renovar seis gubernaturas en México; la alianza PAN, PRI, PRD competirá contra el Morena y sus aliados, y con seguridad su objetivo será no perder más, de lo que ya les quitaron en las elecciones de 2018 y 2021, cuando López Obrador los barrió.
Me parece que hay algunas preguntas que debemos respondernos, por ejemplo, si esta alianza tripartidista, tiene elementos para construir encuadres de comunicación con conceptos rectores ganadores.
La respuesta es, sí tienen elementos suficientes.
Otra pregunta que debe ser respondida es, si deben o no considerar narrativas especiales de comunicación, para dotar de contenido a esos encuadres.
La respuesta es, sí deben construir encuadres de comunicación con narrativas especiales que respondan a lo que ya existe en la mente de los electores: códigos culturales y biológicos.
Y una última pregunta, que deberían responder en los cuartos de guerra de la alianza PAN, PRI, PRD es, si existe un método que les ayude a comunicar de manera más poderosa y persuasiva durante las próximas campañas.
La respuesta es, sí hay y lo pueden construir con Neuromarketing Político y con Neurocomunicación Política.
La clave para ellos está, en utilizar método, encuadres, narrativas y conceptos, que les permitan activar el “botón de compra” en el cerebro y la mente de los electores, con propuestas electorales diferenciadoras, con “vacas púrpuras”.
El “Santo Grial” del Neuromarketing comercial, es encontrar y pulsar ese “botón de compra” en el cerebro de los consumidores, para lograr que compren nuestro producto, marca o servicio.
En la política, el Neuromarketing Político –e incluyo a la Neurocomunicación Política-, también tienen ese Santo Grial y para obtenerlo, se debe encontrar en el cerebro de los electores el botón de compra, para que al pulsarlo tomen la decisión a favor de las ideas o propuestas de nuestros clientes políticos o nuestras marcas políticas.
De ahí que los equipos de comunicación, deban investigar para encontrar el botón de compra, y los equipos profesionales de neuromercadólogos y neurocomunicadores les pueden facilitar las cosas, sumando otras especialidades.
Ingresa a: La Herencia del PRI
Les dejo un tip a esos equipos de comunicación:
Conectar con el cerebro humano elector, se puede lograr investigando y activando uno de dos sistemas:
a) Sistema de recompensa.
b) Sistema de aversión a la pérdida.
¿Qué deben hacer los equipos de comunicación y marketing políticos para conectar adecuadamente con el cerebro de los electores?
Investigar, para decidir bien, cuál de estos dos sistemas activar.
Aquí está la clave.
En cursos y conferencias he compartido que López Obrador supo qué sistema activar y les he explicado cómo lo hizo y cómo se hace.
Sus opositores, seguramente ya entendieron la lección.
*El autor es consultor, tiene estudios de doctorado en Política, de maestría en Comunicación, de maestría en Neuromarketing, de maestría en Ciencia Política y de licenciatura en Derecho.