Villamar, Michoacán.- Un olor azufrado se distingue desde por lo menos un kilómetro de distancia, el escenario parece vacío, decían algunas voces “como de la prehistoria”. Una larga vereda se tiene que atravesar para llegar… huizaches y otra clase de vegetación dificultan el paso.
Ya a unos metros se siente un intenso calor y se escuchan los borboteos, como de agua hirviendo. El guía, advierte que se debe tener precaución pues la tierra es “sensible” y de la nada aparecen pequeñas erupciones que podrían lastimar a los visitantes.
Al llegar al lugar exacto se pueden admirar dos cráteres de tamaño medio, pero, a diferencia de un hervidero común estos son completamente de lodo. “Es tierra hirviendo, abajo hay agua calientísima, son géiseres que de repente explotan y se hacen así”.
El guía previene a los visitantes y les pide no acercarse pues la tierra lodosa es “engañosa”; con cierto temor se acercan algunos curiosos para ver más de cerca y uno de los cráteres avienta cualquier cantidad de barro, se hacen para atrás y continúan su camino.
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A lo largo del paraje se encuentran uno, dos, tres, cuatro, cinco… por lo menos 15 cráteres de diversos tamaños, casi todos burbujeantes, algunos con agua y valor saliendo de ellos.
“Desde los años 1800 se habla de este lugar; pero fue hasta los 1900 que se supo bien de él. La gente viene aquí por barro, sobre todo las mujeres para usarlo como mascarilla; por eso se le conoce como ‘Los Negritos’, porque llegan se embarran y se van a sus casas a bañar”, comenta el guía.
Reiteró qué hay que tener precaución al momento de que una de las visitantes pisó un montículo de tierra que parecía firme y su pie se sumió; alcanzó a sacarlo antes de que “saliera con los puros huesitos”.
Y es que se cuenta, que incluso animales grandes como vacas han caído a los pozos, pues en su intento de beber agua resbalan y ya no logran sacarlos con vida. “A veces ni los recuperan”, dice.
“Los Negritos”, es un lugar ubicado en “La Alberca”, un ejido que pretenden proyectar a través de un proyecto de ecoturismo que este martes fue presentado a la titular de la Secretaría de Turismo, Claudia Chávez López, quien argumentó que se deberán pedir los permisos necesarios y capacitación para que no sea peligroso para los turistas.