Ciudad de México.- Las presidentas de la Junta de Coordinación Política, Ana Lilia Herrera Anzaldo y de las comisiones Para la Igualdad de Género, Diva Hada mira Gástela Bajo; Derechos Humanos, Angélica de la Peña Gómez; y de Vivienda, María Elena Barrera Tapia, se pronunciaron por mantener la voz en alto para denunciar los feminicidios, actuar en consecuencia y evitar “el silencio que es raíz de la violencia y permite a las autoridades ser omisas”.
En la presentación del Mapa de Feminicidios en México, se reconoció que los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial tienen la obligación de aceptar y atender los feminicidios como una pandemia con grave prevalencia entre adolescentes y el crimen organizado.
Diva Gástela, del Grupo Parlamentario del PRI, refirió que el evento se realiza en el marco de los 16 días de activismo contra la violencia de género, con el objetivo de hacer visible y crear conciencia de que es necesario hacer un registro más puntual de los feminicidios.
Actualmente, son responsables de las indagatorias funcionarios que no aceptan la existencia de asesinatos de género, e incluso se llega a borrar evidencias fundamentales en la lucha para erradicar este flagelo del país.
En la jornada de activismo, apuntó, fueron invitados a participar jóvenes de diversas escuelas y universidades, a fin de sensibilizarlos y crear un ejército de defensa de los derechos humanos.
La senadora Herrera Anzaldo, también del Grupo Parlamentario del PRI, refirió que el Senado aprobó en la LXII Legislatura 40 ordenamientos a favor de la igualdad de género y en el curso de la LXIII Legislatura más de 10, previéndose dar un impulso adicional en el siguiente periodo de sesiones, como un elemento fundamental para revertir la violencia.
El Mapa de Feminicidios presenta estadísticas de las regiones con los más altos índices, también da los nombres y cuenta la historia de las víctimas, “hace visible la amplitud y el dolor”. Es una herramienta fundamental para quienes toman decisiones desde los tres poderes del Estado y de los ciudadanos que quieren incidir. “No debemos sustraernos, es una causa que nos involucra a todos, más allá de los números, debemos ser conscientes que es un fenómeno cercano y nos lastima a todos”, señaló.
“Tolerar cualquier tipo de violencia e injusticia es reproducir estos esquemas y presentar la violencia como algo normal”, advirtió la presidenta de la Jucopo, al hacer un llamado a alzar la voz para denunciar las agresiones por causa de género y evitar “el silencio que es raíz de la violencia y permite a las autoridades ser omisas”.
La senadora Angélica de la Peña, del Grupo Parlamentario del PRD, recordó que México recibió una sanción de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, derivada de la denuncia de las mamás de tres chicas desaparecidas, cuyos cuerpos fueron localizados en una fosa clandestina, luego de que las autoridades se negaron a realizar las investigaciones con perspectiva de género.
El problema de fondo en el país, apuntó, es que la agresión contra mujeres se estigmatiza y se pretende ignorar porque en su mayoría están en situación de pobreza, e incluso se les acusa de “irse de farra” o “con el novio”.
Datos del INEGI revelan de entre los años 2007 y 2016, ya vigente la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, fueron asesinadas más de 22 mil féminas, y las denuncias oficiales aumentaron de mil 83 a 2 mil 835 mujeres.
México tiene un gravísimo problema, en especial de los casos de desapariciones forzadas, “ojalá logremos sumar voluntades a partir de estas acciones –en el Senado-, y crear conciencia de que los hombres también son responsables de incidir para que no haya violencia, porque el machismo, mata”, acotó.
María Elena Barrera, del Grupo Parlamentario del PVEM, advirtió que se presentó un mapa epidemiológico del feminicidio, que lo muestra como un problema de salud derivado de diversas causas de violencia.
Se muestran cifras, regiones, pero, sobre todo, el aumento de casos entre adolescentes, de jóvenes que matan a sus novias, de mujeres que son asesinadas por ser parejas de delincuentes.
Este brote de asesinatos de género, nos da cuenta que estamos identificando los casos, pero también debemos clarificar la acusa de estas muertes, subrayó.
La autora del Mapa Feminicidios en México, María Salguero, indició que más de allá de la frialdad del registro de 4 mil 478 asesinatos de niñas, adolescentes, mujeres maduras y de la tercera edad, se hace visible que los feminicidios están cargados de saña.
“Este mapa muestra el horro que se vive en México, donde además existen víctimas invisibles de menores que quedan en la orfandad, sin que haya políticas públicas” para su protección.
Hizo énfasis sobre los feminicidios en contra de menores, que se registra, por lo menos, 111 niñas y adolescentes asesinadas con crueldad, uno de los más representativos es el de una menor de 11 años de edad que recibió 32 puñaladas, por no dejarse besar por su presunto novio de 14 años, quien sólo recibió como sentencia ser vigilado en su casa por sus padres, debido a su edad.
Los feminicidios presentan otras causas, el de líderes de la delincuencia organizada que, a modo de venganza, asesinan a esposas, hijas, madres o parejas de sus enemigos.
En el evento participaron la fiscal especial para los Delitos contra la Violencia contra Mujeres y Trata de Personas de la PGR, Adriana Lizárraga González y estudiantes del Instituto Tecnológico de Apizaco, Tlaxcala.