Estados Unidos podría establecer la prohibición de routers chinos para proteger su infraestructura tecnológica
El gobierno de Estados Unidos está evaluando la prohibición de routers fabricados por la compañía china TP-Link, debido a inquietudes de seguridad nacional.
Un reporte de The Wall Street Journal revela que las agencias de Comercio, Defensa y Justicia están investigando si estos equipos suponen un peligro para la infraestructura tecnológica del país por ser susceptibles a ciberataques.
Miles de dispositivos hackeados
Con una presencia del 65% en el mercado de hogares y pequeñas empresas en EE.UU., los routers de TP-Link han sido implicados en ataques cibernéticos según investigaciones.
Microsoft reportó que miles de estos dispositivos fueron hackeados y usados en operaciones contra contratistas del Departamento de Defensa, entidades gubernamentales y think tanks.
La Oficina de Tecnologías y Servicios de la Información y las Comunicaciones, establecida durante la administración Trump, está al frente de estas investigaciones.
Esta oficina tiene la autoridad de vetar tecnologías extranjeras que se consideren amenazas a la seguridad.
Restricciones a TP-Link
Según informes, las restricciones a TP-Link podrían ser parecidas a las que se aplicaron en el pasado a empresas como Huawei y Kaspersky.
“Estados Unidos sigue jugando a la ruleta contra empresas y amenazas concretas”, dijo Alexis Early, abogado especializado en seguridad nacional, citado por The Wall Street Journal.
En respuesta, una portavoz de TP-Link en Estados Unidos expresó que la compañía está abierta a colaborar con el gobierno para resolver las preocupaciones sobre sus productos.
“Agradecemos cualquier oportunidad de colaborar con el Gobierno estadounidense para demostrar que nuestras prácticas de seguridad se ajustan plenamente a las normas del sector”, afirmó en un comunicado.
Criticas chinas a Estados Unidos
Liu Pengyu, portavoz de la embajada china en Washington, criticó a Estados Unidos por usar el concepto de seguridad nacional como pretexto para oprimir a las empresas chinas.
En el ámbito internacional, Taiwán y la India ya han tomado medidas contra los routers de TP-Link, citando preocupaciones de seguridad.
El Comité Selecto sobre el Partido Comunista Chino en el Congreso de EE.UU. ha pedido al Departamento de Comercio que investigue las vulnerabilidades de estos dispositivos.
La Cámara de Representantes aprobó un proyecto de ley que solicita un estudio sobre los riesgos de seguridad nacional que representan los dispositivos vinculados a adversarios extranjeros.