Dólar se cotiza arriba de los 20 pesos mexicanos este martes 27 de agosto
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El dólar se aproxima a los 20 pesos mexicanos en medio de incertidumbres políticas y económicas.

Ciudad de México.-Este martes 27 de agosto, el dólar estadounidense se aproximó a los 20 pesos mexicanos, marcando el nivel más alto desde diciembre de 2022.

El peso mexicano se depreció hasta los 20.14 pesos por dólar en las ventanillas de CitiBanamex, lo que representa un incremento del 1.21% o 24 centavos en comparación con el cierre del lunes 26 de agosto.

Según datos de Bloomberg, el peso inició la jornada en los mercados internacionales a 19.60 por dólar, reflejando una depreciación del 1.26% o 24 centavos respecto al día anterior.

El incremento en el precio del dólar se dio tras la aprobación del dictamen de la reforma al Poder Judicial por parte de la Cámara de Diputados, generando incertidumbre en el mercado cambiario mexicano.

Analistas de Monex y Base indican que la caída del peso se debe a la incertidumbre generada por la reforma al Poder Judicial y la eliminación de instituciones autónomas, lo que podría afectar la relación comercial con América del Norte, incluidos Estados Unidos y Canadá. Según estos expertos, dichas reformas podrían desalentar nuevas inversiones y la reinversión de utilidades, así como la contratación en empresas mexicanas.

“No hay nada que temer, y si hay modificaciones en el tipo de cambio, como ayer, por ejemplo, tiene que ver con factores externos, como lo que pasa con Japón, Estados Unidos, nada que ver con el Poder Judicial, como mienten los columnistas, expertos, voceros del bloque conservador y corrupto. Nada, está muy bien (la economía en México), de eso no tenemos problema”, afirmó el presidente Andrés Manuel López Obrador en respuesta a preguntas sobre el tipo de cambio.

Recordando que instituciones financieras estadounidenses como The Bank Of America o Morgan Stanley han expresado preocupaciones sobre los posibles riesgos de la reforma al Poder Judicial.

López Obrador también criticó el pasado papel de las calificadoras financieras, quienes según él, “imponían las agendas” y favorecían la privatización de bienes nacionales.