Mientras los legisladores locales se dan su “encerrón” en uno de los lugares más caros de la capital michoacana, Parrilla y Canilla, para discutir y negociar el tema de presupuesto 2017, personal de este establecimiento discrimina a los niños y no les permite el acceso al lugar.
Así sucedió la tarde de este jueves, cuando una reportera que iba acompañada por su hijo y un sobrino, quiso ingresar al lugar junto con varios comunicadores para ingerir algunos alimentos debido a la larga jornada laboral, pues se encuentran a la espera de que finalice dicha reunión, en ese momento una señora que dijo ser al gerente los observo de arriba a abajo y tajantemente les dijo “no pueden ingresar, la entrada de niños a este lugar está prohibida”.
Cabe destacar que en ninguna parte del establecimiento está estipulado que está prohibido el acceso a los menores, por lo que varios reporteros tacharon este acto como discriminatorio, se molestaron y abandonaron el lugar.
Es importante resaltar que este lugar ya cuenta con varias quejas en ese mismo sentido, por su mal servicio, el trato déspota del gerente y la discriminación con los niños.
Pese a esta situación los diputados tienen ya más de ocho horas en ese lugar discutiendo el tema de la reestructura y se sabe que no es la primera vez que acuden a este caro lugar para reuniones de trabajo, se sabe que en diversas ocasiones también se han reunido con el procurador de justicia, José Martín Godoy Castro, con gastos excesivos que al final de cuentas entran al Congreso del Estado.