En Michoacán aún hay comunidades que desconfían del Estado Mexicano como ente encargado de administrar los servicios públicos reconoció Víctor Manuel Tapia Castañeda, delegado de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol), en la entidad.
“Durante muchos años los dejaron solos, no hubo cercanía, no estuvimos presentes, cuando estaban comenzando a suceder hechos lamentables”, reconoció el delegado.
El ocho de junio, él mismo declaró a Contramuro que los indicadores que miden la pobreza en Michoacán se habían estabilizado [en realidad casi lo presumió como si estos hubieran sido difíciles de mantener o incontrolables].
VER: https://www.contramuro.com/60-por-ciento-de-michoacan-esta-pobre-menos-trabajo-y-mal-pagado/
Esa ocasión aseguró que es preocupante el rezago escolar en todos los niveles, además de que los salarios y los días de trabajo han disminuido para el 60 por ciento de la población de la entidad, lo que ocasiona que estén en pobreza y hasta extrema pobreza.
Hay comunidades que desconfían del Estado en todos sus niveles, que “se han sentido muy dañadas y decepcionadas y creen que no hay oportunidades de rescatarlas”.
Dice que en Michoacán se han generado varios modelos de intervención para comunidades que tienen este tipo de problemas, que el gobernador Aureoles encabeza un interesante esfuerzo en la materia, en Cenobio Moreno, Zirándaro y Úspero, aunque hay que adaptarse a los tiempos de la comunidad, menciona, ellos deben de marcar la pauta y en esa misma medida la confianza va creciendo.
Como en todo caso, apunta que a fuerzas ni los zapatos, “tenemos que contar con la aceptación de la comunidad para hacer una intervención”, lo indispensable es tener la confianza reiteró, “si ellos no quieren, no tiene caso, hacer una intervención forzada”, pues en lugar de hacer un bien, puedes traer daños a la comunidad, remató.
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