El MIT lidera la descarbonización universitaria con innovaciones tecnológicas
El Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) está tomando pasos decisivos para disminuir su impacto ambiental a través de un ambicioso proyecto que busca la descarbonización completa de su campus para el año 2050. Comprometidos con la sostenibilidad, han lanzado un programa especializado en la identificación y evaluación de innovaciones tecnológicas que contribuirán a este fin.
El programa, titulado “Tecnología de Construcción – Vías de Reducción de Carbono para el Campus del MIT”, congregó a estudiantes de diferentes niveles para analizar varias soluciones de bajas y cero emisiones de carbono. Su misión culminó en la creación de un informe que propone un camino claro hacia la descarbonización del MIT, presentado a líderes del núcleo climático de la institución el 9 de mayo.
“La misión de la clase es elaborar un documento coherente que describa cómo el MIT puede alcanzar su objetivo de descarbonización para 2050. Estamos evaluando cómo el MIT puede alcanzar estos objetivos a tiempo, qué tipo de tecnologías pueden ayudar y con qué rapidez y agresividad tendremos que actuar”, compartió Morgan Johnson Quamina, uno de los estudiantes.
Bajo la tutela de Christoph Reinhart, profesor de arquitectura, los participantes del curso tuvieron la oportunidad de profundizar en tecnologías revolucionarias, como la energía geotérmica profunda y la captura de carbono, a través de conferencias de expertos en la materia.
“Realizamos un esfuerzo conjunto para entender cómo se amalgaman estas tecnologías y cómo pueden modelar la descarbonización del MIT en la práctica”, dijo Reinhart.
Emile Germonpre, estudiante de ciencia e ingeniería nuclear, expresó:
“Me encanta que este trabajo pueda tener un impacto en el mundo real. La gente no piensa en las calificaciones ni en la carga de trabajo; todos están intrínsecamente motivados para ayudar a resolver este problema.”
Los estudiantes también crearon un modelo para visualizar el efecto de cada intervención tecnológica sobre las emisiones de carbono del campus, una herramienta que demuestra el potencial impacto de distintas estrategias.
Con recomendaciones como la creación de un equipo especializado en energía de edificios y el estudio de la viabilidad de energía geotérmica, el curso propone pasos concretos hacia la sostenibilidad. Estas iniciativas, presentadas al núcleo climático del MIT, tienen el potencial de influir en futuras políticas de sostenibilidad del instituto y podrían ser aplicadas en otras instituciones a nivel mundial, siguiendo el plan climático del MIT de 2015 que aspira a convertir su comunidad en un “banco de pruebas para el cambio”.