La denuncia es por privación ilegal de la libertad, tortura, amenaza y lo que resulte en el caso de las dependencias, en cuanto al particular por violación de la presunción de inocencia
Morelia, Michoacán.- La familia Rodríguez Cisneros, denunció públicamente a la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), La Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) y al activista y aspirante a la Fiscalía General de Michoacán, Guillermo Valencia Reyes, por privación ilegal de la libertad, tortura, amenaza y lo que resulte en el caso de las instituciones; y en cuanto al particular, por violación de la presunción de inocencia, al grabar y transmitir en vivo a un menor de edad.
Lo anterior fue señalado por Pedro Fernández Carapia, activista social en México y Estados Unidos y coordinador binacional de migrantes, además miembro de la familia; quien relató la denuncia pública y exigió se limpié la honra de sus familiares, que dice, fueron “exhibidos de manera arbitraria” en redes sociales y antes de ello, “levantados, golpeados, torturados y amenazados”.
Se trata de un padre de familia J.C. Rodríguez y sus hijos J.M. y G.I. Rodríguez, uno de ellos menor de edad. Según Fernández Carapia, los pasados uno y dos de febrero “levantaron” a cuatro integrantes de la familia, con la supuesta acusación de que eran los secuestradores de dos mujeres en el Centro de Morelia. “Los torturaron para que se declararan culpables”.
Los hechos lo narra a continuación:
“El día sábado dos de febrero de 2019, siendo las 17:30 horas sobre la avenida Morelos norte, colonia, Dr. Miguel Silva, mi nieto G. I. Rodríguez C., fue interceptado por supuestos policías ministeriales, no se identificaron o dijeron cuáles eran sus nombres, se transportaban en un carro gris y dos blanco, sin placas e insignias, con extremo uso de la fuerza subieron a mi nieto a una de las camionetas blancas, le taparon la cabeza, lo esposaron y torturaron en todo momento, le apuntaron sobre su cabeza con armas blancas, buscaron que dijera lo que querían escuchar. Le preguntaron sobre su padre J.C Rodríguez G. y sobre su hermano J. M. Rodríguez C., a quienes les dijeron que debían echarse la culpa de los secuestros que estaban denunciados en Facebook. A mi nieto lo llevaron a un lote baldío ubicado a espaldas de las canchas donde se desarrolla la liga de futbol de Morelia. Le dijeron que iba a amanecer colgado del puente de la salida a Salamanca si no aceptaba lo que decían.
Le dijeron que iban por la cabeza de su papá porque ofrecían 100 mil pesos por ella. En ese mismo lote baldío, bajó de una camioneta lujosa un tipo alto a lo que los hombres dijeron: ‘ya llegó el jefe’ y traía un celular en la mano con el cual estaba grabando a mi nieto y que debía decir dónde estaba su papa y su hermano, mi nieto reconoció al personaje y le dijo ¿eres Memo Valencia?. Le preguntaron a mi nieto si sabía quién era y dijo que sí, porque lo estuvieron apoyando en la pasada campaña a diputado y un día antes, habían detenido a su papá y su hermano.
Memo le dijo a los policías que lo hicieran caminar y les dijo que se lo llevaran a la barandilla, lo bajaron esposado de la camioneta, una de mis hermanas vio cuando mi nieto llegó con golpes y me avisó, yo me preparaba para ir por mi nieto cuando a las 22:00 horas recibí una llamada en mi celular de quien dijo ser Raúl García Magdaleno, quien dijo ser responsable en turno de barandilla, quien me dijo que debía presentarme en el área de barandilla de acción social porque mi nieto le dio mi número de celular y les dijo que yo era su abuelo y que debía llevar copia del acta de mi nieto y mi IFE para que me lo entregaran porque era menor de edad; me trasladé a recogerlo y García Magdaleno que ya estaba ahí, me dijo que me lo iban a entregar pero debía firmar un acta responsiva que tenía espacios en blanco, le dije que así no y los llenó y puso “faltas administrativas” en la razón de la detención y me obligó a firmar para entregarme a mi nieto.
Todo eso son violaciones a sus derechos humanos ya que fue detenido arbitraria e injustamente sin una orden, sin motivo y fuera de todo procedimiento, el sábado 02 de febrero de 2019 por más de 7 horas lo privaron de su libertad, torturaron y golpearon por algo que no cometieron ni él, ni su hermano ni su padre”.
Ante la situación, la familia espera que por oficio las autoridades tomen la denuncia, toda vez que se hizo públicamente en contra dos dependencias del Estado, las encargadas de seguridad y procuración de justicia, de lo contrario, irán personalmente a poner la denuncia penal en contra de quienes resulten responsables de ambas instituciones, por los delitos ya señalados.