Foto: Internet/Secretaría de Cultura Michoacán

Los maestros Abelardo Hernández Araujo y Josafat Pérez Velázquez hablaron en exclusiva con Contramuro.com y dieron a conocer la situación por la que están pasando más de 70 docentes de la Casa de la Cultura, desde hace ya varios años y jamás han tenido respuesta a alguna de sus peticiones.

Por más de 4 años se ha buscado por parte de los maestros regularizar sus intereses y principalmente su sueldo dentro de la Casa de la Cultura, considerando que actualmente existen dos sistemas a los que pertenecen los docentes, en primer lugar se encuentran los maestros con “plaza” y en segundo lugar los maestros “70/30”.

Los de “plaza” son aquellos que gozan de todos los beneficios de una institución, desde prestaciones hasta sueldo fijo; los “70/30” son los maestros que sobreviven solamente del 70% del pago del alumno por taller y el 30% restante se lo queda la Casa de la Cultura. Esta cifra suena muy bien aparentemente, pero deja de serlo cuando se llegan a tener solamente dos alumnos por actividad impartida; a esto le restamos que los que forman parte de este sistema no cuentan con prestaciones y por si fuera poco todavía les retrasan los pagos hasta un mes, así lo dieron a conocer los docentes Abelardo y Josafat.

Estos dos profesores tienen prestando su servicio más de 11 años cada uno, y lo que buscan es que la institución sea completamente trasparente y les recompense su lealtad y desempeño por tantos años de trabajo, pues además condenaron que tiempo atrás siempre han buscado el diálogo con los diferentes directivos de la escuela pero jamás han obtenido una respuesta positiva.

Los docentes “70/30” pasaron a llamarse “becarios” dentro del sistema interno de la institución hace 3 años, acción que viola sus derechos como profesores y los limita a tener cualquier respaldo como trabajadores, por lo que actualmente les pagan en nómina la cantidad de $700 pesos mensuales, un recurso que sale registrado como apoyo a becario, y aunque la institución logró inscribir a varios alumnos al taller del profesor, esa cantidad se llega a retrasar más del mes.

Por ello, los profesores han decidido hacer presión ya que el dinero entra a tiempo por parte del sistema de pago hacia los alumnos.

Antes de llevar el caso hacia el sistema legal mediante una demanda e involucrar a conciliación y arbitraje, los maestros hacen un llamado a la Secretaría de Cultura del Estado de Michoacán para entablar un diálogo y pedir que se les regularice como a todos los demás.