La Marina logra decomiso de más de 7 toneladas de cocaína en operativos en Michoacán y Colima.
La Secretaría de Marina (Semar) ha logrado el decomiso más grande de cocaína de la actual administración en las costas de Colima.
La Armada de México, actuando como Guardia Costera, reportó que recientemente, en una fecha no especificada, personal de la Décima Región Naval y la Décima Cuarta Zona Naval llevaron a cabo incautaciones en dos operativos distintos.
Primer Decomiso de Cocaína
El primer operativo se realizó al suroeste de Manzanillo, Colima, donde efectivos a bordo del buque ARM “Godínez” (PO-132) y con el apoyo de un helicóptero tipo Panther, interceptaron tres embarcaciones menores equipadas cada una con tres motores fuera de borda.
Durante esta operación, se incautaron 126 bultos que contenían aproximadamente 5.6 toneladas de presunta cocaína, marcando la incautación más grande en un solo evento bajo esta administración.
Además, se confiscaron alrededor de 1,100 litros de combustible y 15 individuos fueron detenidos por transgresiones legales.
Segundo Decomiso
En un segundo operativo, con la ayuda del buque patrulla interceptora ARM “Regulus” (PI-1115), una embarcación tipo Defender y un helicóptero tipo Panther, se incautaron 32 bultos balizados a la deriva, los cuales contenían cerca de 1.6 toneladas de presunta cocaína.
Esta carga fue encontrada en una embarcación menor al suroeste de Lázaro Cárdenas, Michoacán, sin reportes de detenciones. En total, se incautaron 7.2 toneladas de cocaína y 1,100 litros de combustible.
Los 15 detenidos fueron trasladados por mar al muelle de los Mandos Navales y entregados a la Fiscalía General de la República (FGR) para la integración de las investigaciones pertinentes.
“Estas acciones son parte de las operaciones de vigilancia marítima, aérea y terrestre que efectúa la Secretaría de Marina a través de la Armada de México, para inhibir la acción delincuencial con el fin de garantizar y mantener el Estado de derecho en las Zonas Marinas Mexicanas”, explicó la Semar en un comunicado.
Según la última Evaluación Nacional de la Amenaza de las Drogas 2024 de la DEA, los Puertos de Manzanillo y de Lázaro Cárdenas son operados por las dos organizaciones criminales más grandes de México: el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y el Cártel de Sinaloa.
Estos puertos son claves tanto para la salida de drogas como para la entrada de precursores químicos necesarios para la producción de drogas sintéticas.
“El cártel utiliza el soborno, la intimidación y la extorsión a funcionarios gubernamentales y portuarios privados para garantizar la seguridad y la entrega de sus envíos de precursores químicos de metanfetamina desde China y de cocaína desde Colombia, Perú y Bolivia”, señala el informe de la DEA.