Morelia, Michoacán.- A estas alturas del confinamiento de una cuarentena que parece infinita, todos hemos tenido que salir una u otra vez para realizar diversas actividades fuera del hogar, así que todos tenemos una idea de qué tal lucen las calles y de cómo es que sigue el rol de la vida cotidiana imponiéndose.
Sabemos que existen varias recomendaciones y medidas (obligatorias algunas de ellas) para mantener un bajo riesgo de contagio, acciones que ayudan a mantenernos lo más sanos posible y fuera del rango del bicho, pero también hemos atestiguado sobre todo los que nos gusta observar con detenimiento, algunas muy grabes contradicciones.
Básicamente han sido cuatro las medidas que todos nos sabemos de memoria, ya que se nos ha repetido hasta el cansancio: Mantener sana distancia, uso de cubrebocas, uso de geles y tapetes sanitizantes y toma de temperatura.
Algunas otras medidas intermitentes han sido respecto a los horarios de apertura de los establecimientos, clausurar áreas de juegos y espacios públicos, bancas de plazas, etc.
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Algunos lugares recreativos familiares como el Parque Zoológico de Morelia, redujeron sus días de apertura, en la entrada de dicho parque se vigilan las cuatro medidas antes mencionadas pero ya al interior, ciudadanos han denunciado, que se puede observar al menos dos fuentes de gran tamaño que se encuentran con agua totalmente sucia y en estados deplorables en términos de salubridad, así mismo adentro hay establecimientos de comida que no cumplen con las normas mínimas de higiene en cuanto a la preparación de alimentos.
Siguiendo con el tema de los alimentos, siempre ha asombrado, pero más ahora, el vacío institucional de la Secretaría de Salubridad en los establecimientos de comida de la ciudad, sean puestos de calle o de locales, al parecer es una leyenda urbana el que alguna vez hayan clausurado algún establecimiento de comida por no contar con las medidas de salubridad estipuladas para esta clase de establecimientos.
Se pueden observarse muchos sitios donde se venden alimentos ya sea en mercados, restaurants, heladerías, etc. en donde se encuentra una sola persona manipulando dichos alimentos y recibiendo el dinero al mismo tiempo para cobrar a los clientes o inclusive aunque hayan más de dos personas, muchas veces no tienen el cuidado ni la logística para no ser la misma persona quien haga estas dos tareas. ¿Será por desconocimiento de la cantidad de virus y bacterias que viajan de mano en mano en el dinero o por una mala costumbre ya vuelta tradición México de pensar que “no pasa nada”? En medio de una crisis sanitaria como la de la pandemia por Covid-19, ¿deberíamos preguntarnos si no será este un buen momento para cambiar de costumbres?
La protección y cuidado de las personas adultas mayores, se supone es una de las prioridades en esta pandemia, no obstante esta premisa, este sector tan vulnerable de la población ha tenido que seguir muchos de ellos visitando clínicas y hospitales para recibir sus medicamentos u hacer alguna otra clase de tramites ya que a estas alturas no se cuenta con un sistema de asistencia para que los adultos mayores puedan recibir sus medicamentos en otros espacios donde no haya tanto riesgo de contagio como lo hay en una clínica y de igual manera con los tramites.
El sistema de Salud evidentemente se ha visto eclipsado poco a poco por el Covid-19, lo que ha implica el descuido de otros sectores de pacientes a los que inclusive ese descuido les ha costado la vida, no hay cifras de esto “daños colaterales”.
Sabemos qué clase de problemas de salud son los que están relacionados con los casos mas graves de Covid-19, hipertensión, obesidad, diabetes y tabaquismo son los factores de riesgo más frecuentes, hablamos de enfermedades con altos indicies en el país y esto se debe principalmente a una mala educación alimentaria y malos hábitos de salud, acompañados de una pobre regulación, sin embargo, en este tema poco hemos visto a las autoridades tanto federales, como estatales y locales, tomar cartas en el asunto. Oaxaca fue pionera en promulgar una ley regulatoria de venta de comida chatarra a menores de edad y se esperaba que en todo el país se replicara esta iniciativa, no ha sido así hasta el momento.
Y siguiendo con las contradicciones, por otra parte en la mayoría de lugares donde se nos ofrece gel antibacterial para poder ingresar, este gel tiene un pésimo aspecto, inclusive ni siquiera huele muchas veces a alcohol pues se sabe que muchas veces este esta rebajado, nuevamente no se ve que ninguna institución publica esté al pendiente de estos aspectos.
Así mismo como ejercicio obligado si hablamos de salubridad, hay que mencionar que Morelia es una ciudad aún en el medievo en cuanto respecta a los dos ríos de aguas negras que la atraviesan, ningún esfuerzo en este sentido.
La ventilación en lugares cerrados es otra medida de higiene básica emitida por el gobierno federal y que poco o nulo ha sido su observancia en la entidad, por ejemplo, algunos lugares como bares pequeños del centro que no cuentan con la correcta ventilación han seguido abriendo sus puertas a los clientes.
Prosigamos con los centros comerciales, ¿le a tocado ver que el termómetro que utilizan una y otra vez muy cerca de las personas sea esterilizado entre una y otra? Es posible que ni siquiera a alguno de nosotros nos haya tocado ver que lo esterilicen en algún momento del día.
Al llegar a las cajas registradoras, el mismo problema de manipular dinero y luego tocar los productos del cliente, las personas en esta labor no se sanitizan las manos entre cliente y cliente para evitar este tipo de contaminación después de recibir el dinero.
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En las calles no se ve un esfuerzo por tenerlas más limpias, no se ven barredoras de esas que limpian con agua y cloro el asfalto, ni brigadas que hagan lo mismo en las banquetas; los tianguis siguen dejando mucha basura y nuevamente se nota una ausencia de autoridades que al parecer su única preocupación en la vía pública es que la gente porte su cubrebocas ahora que está decretado como obligatorio.
En Morelia, se nota un intento por sanitizar algunas calles y recientemente algunos autos de los ciudadanos con el programa “Movilizando Bienestar, campaña de sanitización vehicular”, pero no se nos ha informado aún qué sustancia es la que se está utilizando para este fin, para saber, como cualquier otra sustancia química, cuáles son sus contraindicaciones.
El gobierno estatal ha comunicado que se encuentra ponderando un posible segundo confinamiento obligatorio en Michoacán y cabe también el preguntarnos si ¿será posible que ante la imposibilidad de elaborar y mantener un plan de lógica sanitaria más amplio, congruente, eficiente y sobre todo respetuoso de las garantías individuales, es que las autoridades prefieren otra clase de medidas como el confinamiento, pese a los costos catastróficos que esto conlleva para la economía de muchas familias?
Actualmente Michoacán tiene 38632 casos de Covid-19 registrados desde el comienzo de la pandemia, de los cuales 9396 casos son de Morelia, con un total de 3282 defunciones en el Estado y contando.