Morelia, Michoacán.- El desconocimiento de las leyes ambientales, no exime de la responsabilidad a nadie, enfatizó el titular de la Secretaría de Medio Ambiente, Recursos Naturales y Cambio Climático (Semarnacc) en la entidad, Ricardo Luna García; luego de que aguacateros del municipio de Ocampo, anunciaran que van a crear un “frente” contra el desmantelamiento de huertas de aguacate, encabezado por la dependencia en cuestión.
Y es que a decir de Luna García, son alrededor de 56 mil hectáreas de bosque las que se pierden anualmente por cambio de uso de suelo, principalmente para la siembra de aguacate, que en su gran mayoría es ilegal, pues la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) no ha otorgado permisos de cambios de uso de suelo desde hace aproximadamente 20 años.
En ese sentido, el funcionario estatal comentó que no es precisamente la Semarnacc la que se encarga de todo el operativo, sino que únicamente es parte de la Mesa de Seguridad Ambiental que se conformó en el gobierno de Silvano Aureoles Conejo, para detener y revertir la que consideró “alarmante” pérdida de bosque que año con año ocurre. Además, de evitar el saqueo que derivado de ello, se registra en la entidad.
“El gobierno no está en contra del desarrollo de la actividad agropecuaria. Únicamente buscamos cómo establecer las fronteras permisibles para el cultivo del aguacate y del área forestal. Vamos a continuar con los operativos porque el bosque es patrimonio de los michoacanos, el interés colectivo prevalece sobre el interés particular y cuando hay pérdida de bosque hay disminución de agua, pérdida de suelo, de biodiversidad y contaminación por uso excesivo de pesticidas”, explicó Ricardo Luna.
En el mismo tenor, el secretario de Medio Ambiente consideró que en lugar de hacer “frentes” a operativos que están legalmente constituidos, los que realmente se dicen productores, deberían plantear propuestas y alternativas para ordenar el sector; pues la Mesa de Seguridad Ambiental trabaja mediante denuncias y tras las averguaciones previas que son parte de los operativos, los predios que se han desmantelado no cuentan con permisos de cambio de uso de suelo.
“Debe haber un ordenamiento del aguacate. No puede continuar desarrollándose de manera anárquica. Por el momento hemos incautado los predios y ahora los propietarios deben reforestar las áreas, alrededor de 140 hectáreas que llevamos. Es necesario que establezcamos mesas de diálogo para detener el hecho de cambiar el bosque por huertas de aguacate”, concluyó.