Descubre cómo mejorar la salud intestinal con prácticas efectivas y consejos expertos.
El bienestar digestivo es una preocupación creciente en México, con un 30% de los mexicanos enfrentando problemas como colitis, gastritis y síndrome del intestino irritable, revela la Secretaría de Salud.
Estos problemas, exacerbados por el estrés y malas prácticas alimenticias, impactan a casi la mitad de los adultos, según estudios de la Universidad de Gotemburgo.
Hugo Palafox, vicepresidente de Asuntos Científicos de Immunotec, indica que los trastornos digestivos no solo causan incomodidad, sino que también pueden llevar a problemas crónicos y reducir significativamente la calidad de vida.
“Es indispensable adoptar hábitos saludables para mejorar el funcionamiento del sistema digestivo”, enfatiza Palafox.
Aquí te presentamos los cinco consejos clave para potenciar tu salud intestinal:
Alimentación balanceada: Mantener una dieta rica en fibra y nutrientes es esencial. Esto ayuda a regular el tránsito intestinal y a evitar el estreñimiento. Consulta a un nutricionista para adaptar la dieta a tus necesidades específicas.
Incorporar probióticos: Consumir alimentos como yogurt y kéfir, ricos en probióticos, es beneficioso para la digestión y el sistema inmune. El Dr. Palafox recomienda suplementos como Probio 3+ para mejorar no solo la salud intestinal sino también el estado de ánimo y combatir el estrés oxidativo.
Limitar el alcohol y aumentar la hidratación: El alcohol puede irritar el sistema digestivo y empeorar condiciones como la gastritis. Es crucial moderar su consumo y beber más agua para optimizar la función intestinal.
Gestión del estrés: El estrés tiene un impacto directo en la digestión. Aplicar técnicas de relajación como la meditación y ejercicios de respiración puede mitigar los problemas gastrointestinales y tranquilizar el sistema nervioso.
Comer lentamente: Tomar tiempo para masticar bien los alimentos facilita la digestión, previene la sobrecarga digestiva y ayuda a controlar el apetito irregular.
“La salud intestinal debe ser tratada con la misma importancia que la cerebral”, concluye Palafox, destacando la necesidad de cultivar hábitos que fomenten una salud digestiva óptima a largo plazo.