El aumento de desplazados y tensiones en el conflicto Israel y Líbano pone en alerta a la comunidad internacional.
Líbano.-El Gobierno de Líbano ha reportado este miércoles que el número de desplazados debido a los ataques de Israel ha alcanzado “alrededor de medio millón” desde octubre de 2023, incluyendo aproximadamente 400 mil a raíz de la reciente intensificación del conflicto con bombardeos por parte del Ejército israelí, que ha resultado en más de 550 fallecidos y 1,800 heridos hasta la fecha.
“Inicialmente teníamos 110,000 desplazados y ahora estamos acercándonos al medio millón”, explicó el ministro de Exteriores libanés, Abdalá bu Habib, en un evento del “think tank” Carnegie Endowment for International Peace difundido en su canal de YouTube.
“No podemos continuar en la situación actual”, declaró Bu Habib, destacando que “nadie anticipó que la guerra escalaría a esta magnitud”. “Los libaneses hemos tenido suficiente guerra”, agregó, subrayando la dificultad de los libaneses para aceptar la situación actual.
Te puede interesar: Biden aboga por la diplomacia ante tensión entre Líbano e Israel
En este contexto, Bu Habib resaltó la importancia de Estados Unidos en contener el conflicto, señalando que “Washington es clave para la salvación, si se puede usar esa palabra”. No obstante, criticó que el gobierno israelí, liderado por Benjamin Netanyahu y compuesto por ultranacionalistas y ultraortodoxos, parece “incapaz de sobrevivir sin la guerra”.
Te puede interesar: Gustavo Petro llama “criminal” a Netanyahu en 79ª asamblea general de la ONU
“Por eso no apuestan por un alto el fuego en Gaza. Ahora que Gaza está casi destruida, giran hacia Líbano, donde está Hezbolá, uno de sus enemigos”, explicó. “Están atacando, pero también causan gran daño a Líbano y a los libaneses, que no están tan implicados en la guerra”, lamentó.
“¿Todo esto para qué? Es la destrucción por la destrucción”, criticó Bu Habib, quien enfatizó que tanto israelíes como libaneses están sufriendo. “¿Por qué no podemos encontrar una solución? Podemos llegar a un acuerdo sobre la frontera terrestre, pero Israel debe estar dispuesto a negociar y aceptar poner fin a la ocupación de una pequeña área de Líbano”, afirmó.
Recordó que “Israel aún ocupa una pequeña parte de Líbano, lo que justifica cierta resistencia y otorga cierta legitimidad a esta”, en referencia a Hezbolá, que se ha negado a desarmarse argumentando que las fuerzas israelíes aún controlan parte del territorio libanés.
“Hezbolá es también un partido político con parlamentarios y representantes en el Gobierno. Hablamos con todos en Líbano”, dijo, minimizando la influencia del grupo en el control del país.
Bu Habib insistió en que “matar no trae paz” y que “la guerra solo incrementa los problemas”. Comparó la situación actual con la guerra de 2006, que duró “seis o siete semanas”, y destacó que “solo a través de negociaciones se puede alcanzar la paz”.
Hezbolá comenzó a lanzar proyectiles y drones contra el norte de Israel el 8 de octubre de 2023, un día después de los ataques de Hamás y otras facciones palestinas contra Israel, que dejaron unos 1,200 muertos y cerca de 250 secuestrados. Esto fue seguido por una ofensiva israelí en Gaza que ha dejado más de 41,250 palestinos muertos.
Te puede interesar: Israel ejecuta nuevo bombardeo en Beirut
Por último, Bu Habib recalcó que los problemas entre Israel y Líbano ‘son diferentes’ a los entre israelíes y palestinos. “Ellos luchan por la misma tierra. Nosotros no. Nosotros tenemos una tierra ocupada e Israel lo reconoce”, concluyó, destacando que la situación actual “está siendo creada por lo que está pasando” y “no tiene relación con las políticas de Líbano o Hezbolá”.
La implicación de milicias iraquíes proiraníes, los rebeldes hutíes de Yemen e Irán, aunque “no cree que Irán quiera estar implicado en una guerra”, añadió, señalando que los contactos entre Estados Unidos e Irán estaban programados para el 10 de octubre de 2023 en Omán para discutir el acuerdo sobre el programa nuclear iraní.
Bu Habib finalizó subrayando que el Gobierno libanés “tiene pocas cartas en la mano” para manejar la situación y resaltó la necesidad de que Israel se abra a un proceso de negociaciones, proponiendo el despliegue de militares libaneses en la frontera con Israel, junto a los “cascos azules” de la FINUL, en caso de acuerdo sobre la frontera terrestre.