Con policías y en sede alterna, Congreso aprueba desincorporación
Morelia, Mich.- Custodiados por la Agrupación del Restablecimiento del Orden Público de la Guardia Civil, en sede alterna, eludiendo a trabajadores del Congreso inconformes, y en con un procedimiento legislativo poco claro, integrantes de la LXXV Legislatura del Congreso del Estado aprobaron este viernes, la desincorporación de un inmueble para permutarlo por tres predios en los que se prevé la construcción de un hospital del IMSS en Villas del Pedregal.
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Una intensa jornada fue la vivida la tarde de este viernes en el Poder Legislativo luego de que la sesión convocada en la sede de la Cámara, derivara en la movilización de trabajadores que buscan ser dados de baja por el Congreso, para –de acuerdo con señalamientos realizados por los propios legisladores- disponer de ese recurso y repartirlo entre los 40 diputados.
Con pancartas acusando a la Junta de Coordinación Política de violar sus derechos, los trabajadores acordonaron con lazos el acceso principal a Palacio Legislativo, así como las arterias que colindan con la Avenida Madero y la Calle Pino Suárez. También generaron brigadas para bloquear los accesos alternos a la Cámara.
Fue entonces que integrantes de la Agrupación del Restablecimiento del Orden Público de la Guardia Civil, haría acto de presencia, primero buscando amagar a una trabajadora que custodiaba en la calle Aquiles Serdán la entrada a la Biblioteca del Congreso, en donde hay un acceso oculto que permite entrar al Salón de Sesiones.
La amenaza de llevarse a la manifestante a barandilla por parte de los uniformados, se vería frustrada cuando, camarógrafos y reporteros llegaron para tomar imágenes de lo que estaba ocurriendo.
Los elementos policíacos se trasladarían frente a Palacio Legislativo, pero tiempo después se retiraron del lugar, ya que el acuerdo en la Junta de Coordinación Política fue habilitar como recinto legislativo el Palacio Clavijero.
Con toletes y casos los uniformados se apostaron en el acceso principal del inmueble histórico, en donde personal de la Secretaría de Gobierno del Estado se encargaron de señalar quiénes podían entrar o no al lugar.
Los trabajadores inconformes se darían cita hasta ahí, cerrando el tránsito en la calle Ocampo, sin embargo los legisladores fueron pasando poco a poco entre los uniformados para sesionar y aprobar el dictamen que resultaba de particular apremio para el gobernador Alfredo Ramírez Bedolla.
Los periodistas estaban vetados de la sesión legislativa, las instrucciones de los uniformados eran sólo permitir el acceso a diputados y a aquellos referidos por los funcionarios de la Secretaría de Gobierno.
A solicitud de los comunicadores, el diputado de Morena Juan Carlos Barragán buscó introducirlos al lugar, pero fueron encapsulados por los elementos policíacos con todo y diputado.
Finalmente el legislador morenista entró a Palacio Clavijero, y haciendo uso del micrófono solicitó el acceso para la prensa, a lo que la presidenta de la Mesa Directiva, Adriana Hernández Íñiguez respondió: “¿Quieren que les diga la verdad?, yo no tengo el control de la seguridad y de lo que aquí está”.
Junto con las legisladoras Julieta Gallardo Mora y Margarita López Pérez, Barragán Vélez acudió a la entrada de Palacio Legislativo para permitir el acceso de la prensa, lo que derivó en golpes y jaloneos contra el legislador y periodistas. Finalmente los comunicadores entrarían al lugar.
Al interior, una vez que concluyó la lectura del dictamen con proyecto de decreto elaborado por la Comisión de Hacienda, al hacer el uso de la palabra, legisladores de oposición cuestionaron la irregularidad en el proceso legislativo, ya que en este tipo de asuntos la Comisión de Gobernación debe intervenir en el proceso de dictaminación.
De hecho, en la última desincorporación autorizada al Ejecutivo este año –también para el IMSS- en el proceso participaron las comisiones de Gobernación, Hacienda y Desarrollo Urbano. Ahora no fue así.
El tema se complicó para el Ejecutivo del Estado debido a que la iniciativa para la solicitud de desincorporación, fue turnada de manera tardía al Congreso, ya cuando estaba por cerrar el periodo ordinario de sesiones, por lo que no pudo ser turnada al Pleno.
Debido a que el IMSS debe contar con la certeza de la posesión del lugar en que construirá el hospital para incorporar la obra a su presupuesto del 2023 –lo que debe realizar antes del 15 de agosto-, el Ejecutivo tenía apremio por que la autorización en la Cámara se diera a la brevedad.
Aún y cuando legisladores reconocieron que el procedimiento fue irregular y desaseado, optarían por aprobar el dictamen para no pagar un posible costo político de votar contra una autorización para la construcción de un hospital.
La única mantuvo su determinación de votar en contra, fue la legisladora Julieta Gallardo Mora, pues ni la petista Belinda Hurtado que anunció en la sesión que así lo haría, se sostuvo.
En la sesión las intervenciones de los diputados se enfocarían en su mayoría al despido de personal que se está realizando en la Cámara, así como al proceder de la Junta de Coordinación Política.
Al hacer uso del micrófono Juan Carlos Barragán cuestionó el por qué se da de baja a empleados que sí trabajan, mientras que permanecen sin laborar personajes como “Miguel Corona Salto, que está bajo la nómina de Fidel Calderón Torreblanca”.
Asimismo, acusó a su coordinador parlamentario de haber acaparado los espacios que correspondían a Morena.
Roberto Reyes Cosari también de Morena, adelantó que el próximo lunes está acudiendo ante la Junta de Conciliación para promover acciones legales en contra el despido irregular de trabajadores asignados a él, así como del resto de los que están siendo dados de baja.
“Sin duda hay privilegios en este Congreso, esta forma desigual entre diputados es una total irregularidad, me parece indignante que hoy se despida a trabajadores para que unos cuantos mantengan sus privilegios”.
Roberto Reyes Cosari, Diputado de Morena
Oscar Escobar dijo que todos los diputados son “responsables solidarios” en el exceso de personal, ya que todos contrataron personal.
Acusó que existan diputados que se den golpes de pecho, y los señaló como responsables de la movilización de trabajadores suscitada este viernes.
La panista Andrea Villanueva se fue contra los trabajadores sindicalizados: “empecemos por denunciar a los sindicalizados que son aviadores, hay que darlos de baja, seguimos protegiendo a empleados de exlegisladores”.
Cuando el priista Felipe Contreras Correa recordó que está pendiente una reunión de los 40 diputados para abordar los temas financieros del Congreso, las voces gritando a coro “¡hoy!, ¡hoy!”, de parte de algunos legisladores se harían sentir.
Finalmente se determinó que la discusión sobre el dictamen para la desincorporación se había agotado, por lo que fue sometido a votación, aprobándose por mayoría.
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