Especialistas apuntan que comúnmente la población tiende a meter las esponjas para limpieza de los platos al microondas para calentarla y así matar bacterias
Dentro de la mayoría de los hogares se encuentra el nido de bacterias que generalmente logra pasar desapercibido, la esponja de cocina.
De acuerdo a un estudio publicado en Scientific Reports, algunos especialistas señalan que comúnmente la población tiende a meter la esponja de cocina al microondas para calentarla y así matar bacterias, sin embargo, esta acción solo elimina a las más débiles, de manera que las que son más fuertes sobreviven y se expanden para ocupar el espacio heredado por las que fueron eliminadas.
En este sentido, Markus Egert, microbiólogo de la Universidad de Frutwangen en Alemania, identificó 362 especies de bacterias que habitan en la esponja de cocina. Además, se sorprendieron al encontrar la densidad con la que ocupan un espacio, ya que detectaron que en tan solo 16 centímetros cúbicos pueden vivir cerca de 82 mil millones de bacterias.
La mayoría de las esponjas atraen bacterias, a través de la comida , la piel u otras superficies, además ofrece condiciones atractivas para ellas, como ser espacios ricos en humedad y calidez.
Entre los microbios más comunes está el moraxella osloensis, el cual pude causar infecciones en la gente con sistemas inmunitarios débiles. Se encuentra ampliamente presente en la naturaleza y vive en la piel humana.
Es el principal responsable de fuerte olor a ropa sucia, puede ser la razón por la que muchas esponjas terminan emitiendo un aroma fétido.
Por eso los especialistas presentaron tres sugerencias para eliminar estas bacterias.
-Remplazo. El doctor Egert señaló que si no se puede limpiar constantemente la esponja es mejor remplazarla por una nueva cada semana aproximadamente.
-Lavarla. Un método para eliminar la mayor cantidad de bacterias es lavarla en lavadora con agua lo más caliente posible con detergente en polvo y cloro.
-Usos. Es recomendable que después de usar la esponja de cocina para la limpieza de vajillas, se cambie el uso, es decir, en lugar de ser para la cocina puede utilizarse en otras zonas de la casa como por ejemplo, limpiar el baño.
Con estas tres recomendaciones la población puede seguir usando su esponja de cocina para lavar los platos y saber qué hacer para eliminar las bacterias que puedan vivir en ellas.