Denuncian secuestro de nueve mujeres colombianas tras acudir a un evento en Tabasco; se presume que crimen organizado esté detrás
El gobierno de Tabasco confirmó que el 12 de enero se presentó ante la Fiscalía General del Estado (FGE) una de denuncia por el presunto secuestro, en un evento, de nueve mujeres colombianas.
Juan Carlos Castillejos, vocero institucional, dijo que el hecho es “lamentable”, pero, aunque las colombianas no han sido vistas desde hace una semana, fue hasta este viernes en que se informó a las autoridades de lo ocurrido.
“Lamentable el hecho, pero hay que ser claro, la denuncia apenas se conoció hoy, una semana después. No hay más datos, sin embargo, la @FGETabasco realizará las investigaciones a partir de la denuncia y estaremos atentos al tema”, expresó en su cuenta de X.
El caso fue expuesto por el periodista Ciro Gómez Leyva, quien señaló que las mujeres fueron secuestradas tras asistir a una fiesta privada.
La denuncia fue realizada por compañeras del mismo grupo, quienes vivían juntas en la capital tabasqueña y que se alarmaron cuando no aparecieron y no se comunicaron.
Red de trata de personas
En la información presentada por el periodista se afirma que fueron enviadas a la fiesta por Saulo David Sánchez Zetina, alias “El Jaguar”, presunto líder de una red de trata de personas del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
Las víctimas, pertenecientes a un grupo de 50-70 jóvenes traídas desde Colombia, llegan con una deuda de 120 mil pesos, trabajando para saldarla. Se les retienen pasaportes y se les prohíbe salir sin supervisión.
Una denunciante logró hacer una videollamada con algunas de las mujeres, confirmando que están vivas, pero golpeadas; todo indica que para liberarlas se pide a cambio la presencia de Saulo David Sánchez.
Solo se conocen los nombres reales de cinco de las nueve desaparecidas: Nicol García, Mariana Garcés, Talía Velásquez, Valentina Pachón y Wendy Murcia.
En diversas ocasiones el gobierno de Tabasco ha rechazado que en la entidad operen cárteles del crimen organizado, por lo que se atribuye la violencia a bandas locales.
Hasta el momento, ninguna autoridad ha dado mayores datos respecto de lo que ocurrió con el grupo de mujeres, ni se ha confirmado si efectivamente son víctimas de una red de trata de personas.