Morelia, Michaocán.-El 11 de agosto del 2012, es la fecha más significativa para el futbol mexicano en fecha imborrable en la que Selección Nacional Mexicana Sub-23 le arrebató el oro Olímpico a Brasil, de Neymar, en el mítico Estadio de Wembley en la final de la justa veraniega de Londres 2012.
La conquista de la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Londres 2012 es la máxima conquista del balompié nacional, igualando lo hecho en los Mundiales Sub-17 de Perú 2005 y México 2011, donde en ambos casos, alzó la copa de campeón. Las tres máximas alegrías de la afición en toda su historia a nivel selecciones.
A partir de ese momento, el conjunto azteca no ha tenido la misma calidad, tanto en niveles menores como en el representativo mayor, que, al día de hoy, tiene ya prácticamente asegurada su presencia en el campeonato Mundial en Rusia, pero con un sinnúmero de cuestionamientos por la forma de dirigir de su actual técnico el colombiano Juan Carlos Osorio.
Aquel 2-1 conseguido precisamente hace 5 años, llenó de orgullo y satisfacción a un país entero que vibró y lo festejo como nunca antes lo había hecho. Un extraordinario Oribe Peralta, quien se encumbró como héroe deportivo nacional al clavar el doblete de la final contra un Brasil que en sus filas contaba con el que es hoy el futbolista más caro de la historia: Neymar, además de otras grandes estrellas como Marcelo, Thiago Silva, Hulk o Pato, entre otros.
La escuadra mexicana fue dirigida por el técnico Luis Fernando Tena, quien logró lo que ningún otro técnico ha conseguido con un grupo de 23 guerreros. Ahora el “flaco” Tena se encuentra desempleado desde hace más de un año. Su último equipo en la Liga MX fue el León.
El Tri Olímpico fue de menos a más en Londres 2012, comenzó en el Grupo B con un empate sin goles ante Corea del Sur, luego vencieron a Gabón 2-0 y después derrotaron a Suiza en su tercer compromiso en fase de grupos. De ahí nadie los detuvo. La inercia de los nacionales fue excepcional. Vencieron a Senegal 4-2 y luego eliminaron en Semifinales a Japón por 3-1, para así llegar a la disputa por el oro ante Brasil.
Uno de los héroes, hoy es desempleado
Los héroes de la gran gesta fueron el portero José de Jesús Corona, el defensor Carlos Salcido y el goleador Oribe Peralta que fueron los tres refuerzos mayores de 23 años del Tri.
Los delanteros que se bañaron en oro, además de Peralta, fueron Raúl Alonso Jiménez, Giovani dos Santos, y Marco Fabián.
En tanto que los mediocampistas campeones fueron Javier Aquino, Jorge ‘chatón’ Enríquez, Héctor Herrera, Javier Cortés, y Miguel Ángel Ponce.
En la defensa estuvieron: Néstor Araujo, Diego Reyes, Néstor Vidrio, Israel Jiménez, Darvin Chávez, Hiram Mier, y Carlos Salcido. Como porteros además de Corona y participó José Antonio Rodríguez.
De los 23 futbolistas medallistas de oro, hoy lastimosamente se encuentra desempleado y sin equipo Darvin Chávez. Inició en Atlas, ganó un puesto titular en Monterrey y una lesión de ligamento cruzado trastabilló el paso ascendente del defensa. El campeón de la Liga de Campeones de la Concacaf y convocado para la Copa Oro 2015 encontró refugio la temporada pasada en los Tiburones Rojos del Veracruz. Fue efímero. Una vez terminado el Clausura 2017, se acabó su contrato y a tocar puertas, hoy es desempleado.
Además contrario al buen proceso llevado rumbo a Londres 2016, el Tricolor Olímpico no tuvo la misma preparación en su proceso para defender el oro y en los Juegos de Río de Janeiro 2017, la selección nacional no pasó de la primera ronda del torneo.
Tras el máximo logró del futbol mexicano de la medalla de oro olímpica, México ha vivido más fracasos que éxitos, pues con la Selección Mayor para el pasado Mundial de Brasil 2014 se avanzó de “panzazo”.