Michoacán es conocido por sus extensos lagos, ríos y presas.
¿Sabías cuántas presas hay en Michoacán?
Morelia, Michoacán a 16 de julio de 2024.- Según el Sistema Nacional de Información del Agua (SINA) de la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA), en Michoacán están registradas 24 presas.
Entre las principales se encuentran Infiernillo, Tepuxtepec, Gonzálo, Aristeo Mercado, El Bosque, Cointzio, Mata de Pinos, Zicuirán y Francisco J. Mújica. Pero también Los Olivos, La Villita, Tarecuato, Sabaneta y Tepuxtepec.
Michoacán es el estado con más presas en México, seguido por Jalisco con 23, y Durango, Estado de México y Zacatecas, con 13 cada uno.
Presa Infiernillo La presa de Infiernillo es la infraestructura hidroeléctrica más importante de Michoacán.
Está ubicada en el río Balsas y es crucial para la generación de energía en la región. Además, tiene un impacto significativo en el suministro de agua.
Presa Francisco J. Múgica Ubicada en los límites de Múgica y La Huacana, Michoacán, la presa Francisco J. Múgica es una obra de usos múltiples.
Su principal función es el riego agrícola, cuenta con una planta de generación de energía y se prevé desarrollar actividades piscícolas y turísticas a mediano plazo.
Presa La Villita También conocida como Presa José María Morelos, está en el río Balsas entre Lázaro Cárdenas, Michoacán, y La Unión de Isidoro Montes de Oca, Guerrero. Operativa desde 1973, tiene una central hidroeléctrica que genera 300 megawatts y un embalse con capacidad para 541 hectómetros cúbicos de agua.
¿Qué es una presa?
Las presas son estructuras fundamentales para el control de inundaciones, la generación de energía eléctrica el abastecimiento de agua en México y el riego en actividades agrícolas.
¿Cuál es la presa más grande de Michoacán?
La presa Adolfo López Mateos, conocida como “El Infiernillo”, es la más grande del Estado y se encuentra en los municipios de Arteaga, La Huacana y Churumuco en Michoacán, y en Coahuayutla, Guerrero.
Fue construida por la Secretaría de Recursos Hidráulicos entre agosto de 1962 y diciembre de 1963, entrando en operación el 15 de junio de 1964.
Su propósito principal es captar agua para generar energía eléctrica, facilitar el riego y controlar inundaciones, con un embalse tiene una capacidad total de 12,000 millones de metros cúbicos, alimentado únicamente por precipitaciones pluviales y escorrentías superficiales del centro del país.
Con una longitud máxima de 120 kilómetros y una profundidad media de 35 metros, las áreas inundadas varían entre 34,600 y 14,100 hectáreas, ocupando el 3.48% del territorio estatal.
La presa está integrada a la Reserva de la Biosfera Zicuirán-Infiernillo (RBZI), que abarca 265,118 hectáreas y fue designada como área protegida por decreto del Poder Ejecutivo federal el 30 de noviembre de 2007.
La presa Infiernillo está conectada directamente con el océano Pacífico a través del río Balsas, lo que la hace desemboca directamente al mar.