La canonización de Mama Antula simboliza la unión espiritual y política entre Argentina y el Vaticano.
Roma.-En una ceremonia histórica en la Basílica de San Pedro, el presidente de Argentina, Javier Milei, se reunió con el papa Francisco, destacando la canonización de María Antonia de San José de Paz y Figueroa, conocida como Mama Antula, la primera santa de Argentina.
El evento no solo tiene un significado espiritual, sino que también engrandece el orgullo nacional argentino.
Por su parte el presidente Javier Milei, al frente de la comitiva argentina, destacó ante los medios la importancia de este acto para la nación. Acompañado de importantes figuras políticas, la presencia argentina en la misa, que dio inicio a las 9:23 horas locales, representa la fusión de la fe con el patriotismo en un evento de gran significado.
“El Presidente Javier Milei participó de la canonización de María Antonia de Paz y Figueroa, ‘Mama Antula’, en la Basílica de San Pedro, en una ceremonia llevada a cabo por Su Santidad, el Papa Francisco, para convertirla en la primera santa argentina”, comunicó la cuenta oficial de la presidencia.
Por su parte, el Papa Francisco brindó un cálido saludo a Javier Milei después de la ceremonia, un acto que enfatiza el respeto recíproco entre ambos líderes. Este momento, sellado con un abrazo, refleja la solidez de los lazos diplomáticos y personales en el ámbito global.
El pontífice también extendió su cordialidad a otros integrantes de la delegación, fortaleciendo la relación entre el Vaticano y Argentina.
La reunión privada pautada para el 11 de febrero entre Milei y el Papa Francisco en el Palacio Apostólico agrega profundidad al significado de estos encuentros. El diálogo entre el mandatario y el líder espiritual destaca la relevancia de la cooperación y comprensión mutua en la promoción de valores comunes.
La delegación argentina, que incluyó al jefe de Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y al gobernador de Santiago del Estero, en la canonización de Mama Antula, marca un punto de convergencia nacional e internacional.
Este evento no solo celebra la canonización de una figura histórica de Argentina, sino que también pone en relieve la importancia de la fe, la cultura y la política en la creación de puentes entre naciones y pueblos.