El bozal electoral en Michoacán impone el silencio ante la inseguridad en las elecciones del 2024.
Bozal electoral
Dice la frase: “calladito te ves más bonito”, y en el caso de Michoacán, pareciera no importar que ese silencio sea el que proviene de la muerte, siempre y cuando no genere mala publicidad.
Así, frente a la violencia que se ha registrado en el proceso electoral y que ha cobrado la vida de un aspirante y dos precandidatos a la alcaldía de Maravatío, además de una militante del PT en Jacona y la desaparición de otro en Santa Cruz Tanaco de Más Michoacán, la inseguridad en la contienda se ha vuelto tema de atención mediática local y nacional, así como de preocupación profunda para los actores políticos.
La lógica supondría preocupación para la instrumentación de acciones inmediatas de prevención y protección, pero no es así. La preocupación de las autoridades parece radicar más en la mala imagen y el costo político que las muertes y la inseguridad en las elecciones les está generando.
Prueba de ello es el “Protocolo de protección y seguridad a candidatos, en el desarrollo de las campañas electorales en el Proceso Electoral y Federal 2023-2024”, elaborado por la Secretaría de Gobierno del Estado.
Dicho protocolo enfoca buena parte de sus contenidos en colocarles a los candidatos y partidos un bozal para que no hablen con la prensa sobre los riesgos e inseguridad de los que son objeto.
A diferencia de los protocolos de seguridad elaborados por el Gobierno de la República y por el Instituto Nacional Electoral, que son públicos y carecen de este tipo de restricciones, el de Michoacán prohíbe expresamente a los candidatos hablar sobre las situaciones de riesgo de las que son objeto.
Bajo el argumento de la eficacia de las medidas de protección que se les provea –luego de una serie de requisitos que deben cumplir- en dicho protocolo “queda prohibido a la persona candidata, a los órganos directivos de los partidos políticos y a los representantes jurídicos de las candidaturas independientes que divulguen de manera pública” la medida de protección. ¿Así o más bozal?
Incluso en el protocolo se establece que toda la información generada por éste “se considerará reservada por motivos de seguridad en los términos dispuestos por la Ley de la Materia”.
La postura estatal contrasta profundamente con la federal, tomando en cuenta que ayer martes el Gobierno de la República difundió un documento entre los medios de comunicación, con los detalles del protocolo de seguridad que prevé aplicar a candidatos que lo soliciten, incluyendo tipo de unidades, número de elementos, etcétera, etcétera.
El protocolo michoacano carece de cualquier medida preventiva para que no sea necesario que los contendientes sean amenazados o agredidos y requieran protección.
En el caso del INE su protocolo es amplio en acciones de prevención, partiendo incluso de la elaboración de un diagnóstico para atender anticipadamente riesgos. Las autoridades estatales continúan rechazando la instalación de una Mesa de Seguridad apegada al protocolo del Instituto, sin duda están poco interesadas en prevenir que en lamentar y silenciar.