Activistas a favor del medio ambiente, aseguraron que el gobernador Bedolla pretende un “borrón y cuenta nueva” aguacateros que devastaron el bosque
Morelia, Michoacán.- Un “greenwashing” o un “borrón y cuenta nueva”, es lo que pretende el gobernador de Michoacán, Alfredo Ramírez Bedolla, para con los aguacateros que devastaron el bosque michoacano en distintas zonas y regiones.
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Así lo denunciaron integrantes de distintas organizaciones y activistas en pro del medio ambiente, la mañana de este lunes, al señalar que parte del plan de la que será la nueva Secretaría del Medio Ambiente, ya lo tiene incluido en su programa de trabajo.
“Proponen hacer un greenwashing con aguacateros, es decir, a darles certificaciones verdes a modo de exoneración de su huella ecológica, es decir un borrón y cuenta nueva después de la devastación de bosques que han hecho los aguacateros, esto con el fin de que puedan vender sus productos a nivel internacional”,
Integrantes de distintas organizaciones y activistas en pro del medio ambiente
Lo anterior fue denunciado, luego de que países de todo el mundo, exijan ya una certificación de que el cultivo del aguacate no daña el medioambiente, debido a la gran ola que se “desató” por la plantación de aguacate, sobretodo en sitios como México y específicamente en Michoacán, donde con tal de plantar árboles de aguacates, los productores están dispuestos a quemar los bosques.
Dicha situación en el contexto mundial del cambio climático, ha encendido las alarmas de los ambientalistas en todos los continentes, de ahí, que de un tiempo para acá se exija este certificado, que señale que el suelo donde se planta el aguacate de exportación, no fue devastado y se tiene la tecnología necesaria para su riego.
Foto. Ireri/Contramuro
Y es que hay que hacer mención, que para producir un kilo de aguacates, se requiere de entre mil y dos mil litros de agua, dependiendo de la zona. Y en épocas de sequía, se requieren hasta 5 mil litros de agua para un solo kilogramo de aguacates, lo que ha levantado alarmas mundiales, al necesitar para dicho cultivo, el agua que abastece incluso, a pequeñas poblaciones.
“Este es un regalo del gobierno a los depredadores de los bosques y aguas de los michoacanos el plan que circula del gobernador tiene totalmente una vocación aguacatera y fresera, con ausencia en la perspectiva ambiental y la soberanía alimentaria”.
Integrantes de distintas organizaciones y activistas en pro del medio ambiente
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