Casi 40 víctimas mortales tras los ataques aéreos de represalia de Estados Unidos en Siria e Irak
Los recientes ataques aéreos realizados por Estados Unidos en territorio de Siria e Irak han resultado en la muerte de casi 40 personas, según fuentes del Observatorio Sirio de Derechos Humanos y autoridades de Irak.
Estados Unidos confirmó haber atacado más de 85 posiciones e instalaciones asociadas con la Guardia Revolucionaria iraní, en una serie de bombardeos que han sido descritos como actos de represalia.
Según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, una organización no gubernamental con extensas conexiones en la región, al menos 23 individuos fallecieron en Siria, incluyendo a nueve ‘combatientes sirios’. Mientras tanto, el Ministerio de Defensa de Siria ha informado sobre ‘la muerte de un número de civiles y soldados’ y ‘daños significativos a la propiedad pública y privada’, aunque no ha proporcionado detalles concretos.
Por otro lado, las autoridades iraquíes han lamentado la pérdida de al menos 16 vidas, incluyendo civiles, en el oeste de su nación debido a estos bombardeos, que marcan la primera respuesta militar de Washington tras la muerte de tres soldados estadounidenses en Jordania, un hecho que Irak atribuye a milicias proiraníes.
Los ataques en Siria se concentraron en áreas estratégicas como Al Mayadín, Deir al Zur y Al Bukamal, esta última una zona fronteriza con Irak y clave para el suministro de las milicias aliadas al gobierno sirio. El Observatorio reportó que 27 ‘importantes’ objetivos fueron destruidos en la ofensiva.
En Irak, los bombardeos se dirigieron a la Multitud Popular, un conjunto de milicias aliadas al gobierno e integradas en las fuerzas armadas del país, específicamente en las áreas de Al Qaim y Akashat, cercanas a la frontera siria.
El ataque en Jordania, que provocó la respuesta estadounidense, fue reivindicado por grupos proiraníes que forman parte de la Multitud Popular. Sin embargo, Estados Unidos ha señalado a Irán como el principal responsable detrás de dicho ataque.