En Nahuatzen se van componiendo las cosas, “poco a poco”, aseguró el gobernador de Michoacán, Silvano Aureoles. Este municipio indígena tiene meses padecer un conflicto político, entre dos grupos que se pelearon la presidencia municipal en las pasadas elecciones.
Ayer fue instalada una Base de Operaciones Mixtas en ese lugar, estrategia del Gobierno de Michoacán para brindar seguridad en la zona, sobre este tema se le preguntó esta mañana al gobernador Silvano Aureoles y se limitó a responder que hay avances, “tamos trabajando para reencauzar (…), yo espero que esta semana tengamos avances y poco a poco regrese a la normalidad”.
El mandatario aseguró que los vehículos que los manifestantes tenía retenidos ya fueron entregados, eran más de 30 incluida una pipa de gas y dijo que su administración continuará privilegiando el diálogo.
El miércoles 18 de mayo de 2016 la tensión en lugar aumentó los habitantes quemaron dos camiones y desarmaron a la policía municipal como protesta por la indiferencia del gobierno de Silvano Aureoles y en reclamo de más seguridad para la zona; aseguran que el presidente municipal Miguel Prado Morales tiene nexos con el crimen organizado. También han secuestrado a funcionarios municipales y del gobierno estatal.
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