Morelia, Michoacán.- La aprehensión del ex vocero de las autodefensas, José Manuel Mireles Valverde, el 27 de junio del 2014, fue un factor más para la desarticulación de los grupos de civiles armados, de acuerdo a la estrategia que emprendió el gobierno federal, a través del comisionado para la Seguridad y el Desarrollo Integral de Michoacán, Alfredo Castillo Cervantes, para contener el avance de este movimiento por la geografía michoacana.
Los grupos de autodefensa surgidos el 24 de febrero del 2013 para combatir el sometimiento a la población por parte del cartel de Los Caballeros Templarios, alcanzaron presencia en al menos 33 municipios de la entidad, de acuerdo con el informe sobre el asunto elaborado por la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), y ante el avance, las autoridades federales decidieron intervenir para evitar el arribo de estos grupos a Morelia.
La estrategia del comisionado fue primero legitimar, y posteriormente legalizar a los autodefensas, mientras a la par, al menos 35 líderes del movimiento fueron asesinados desde el 2014 a la fecha; otros más han sido procesados penalmente, como el caso de Mireles Valverde.
Sin embargo, esa no ha sido la primera ocasión que Mireles Valverde ha pisado la prisión, pues el 8 de noviembre de 1988, el doctor fue arrestado en su casa en Tepalcatepec, en posesión de 86 kilos de mariguana empaquetados en diez costales.
El expediente del proceso penal 209/988, que posteriormente se registró como II-233/988, revela que Mireles Valverde fue sentenciado a 7 años y tres meses de prisión en Uruapan por el delito de contra la salud, en su modalidad de siembra, cultivo, cosecha, posesión y venta de marihuana.
No obstante, el ex vocero de las autodefensas tan solo permaneció tres años y ocho meses en prisión, a pesar de que la sentencia fue emitida el 15 de mayo de 1991, y catorce meses después, el 9 de julio de 1992, recibió tratamiento de preliberación, a partir del cual, la Comisión Dictaminadora de la Dirección de Prevención y Readaptación Social de Michoacán concluyó que Mireles Valverde “revela adecuada readaptación”, por lo que fue liberado.
En su segunda aprehensión, atribuida por sus simpatizantes al activismo del doctor Mireles y su constante crítica al proceder de las autoridades federales, el ex vocero de las autodefensas fue enviado al Cefereso número 11, en Hermosillo, Sonora, donde permaneció interno hasta el 1 de noviembre del año pasado, cuando fue trasladado al Cefereso número 4, en Tepic, Nayarit.
Durante estos casi tres años de prisión preventiva, los jueces de distrito que llevaron la causa, negaron los amparos interpuestos por la defensa jurídica de Mireles Valverde, encabezada por el abogado Ignacio Mendoza Jiménez.
A través de varios audiomensajes enviados desde prisión, el ex líder de las autodefensas solicitó la intervención del presidente, Enrique Peña Nieto; el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong y el gobernador del estado, Silvano Aureoles Conejo, ya sea para que se concretera su libertad o al menos su traslado al Cereso “David Franco Rodríguez”, conocido como Mil Cumbres, en Morelia.
En su proceso intervinieron y solicitaron su liberación reconocidos personajes, como Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano; Andrés Manuel López Obrador; el sacerdote Alejandro Solalinde; el gobernador de Nuevo León, Jaime Rodríguez Calderón, “El Bronco”, el ex líder de la autodefensa de La Ruana, Hipólito Mora Chávez e integrantes del partido Movimiento Ciudadano, por mencionar a algunos.
Los simpatizantes y familiares de Mireles Valverde, como su esposa, Ana Valencia Chávez o su hermana, Virginia Mireles Valverde, organizaron manifestaciones en favor de la liberación del doctor, además de acusar a Alfredo Castillo Cervantes de influir en el proceso penal, a fin de que no se le permitiera enfrentarlo en libertad.
Los activistas en favor del Mireles Valverde acusaron a las autoridades de impedir que se otorgaran los amparos, e incluso criticaron que, tras la solicitud de traslado al Cereso Mil Cumbres, para el cual dio su beneplácito mediático en un primer momento el Gobierno de Michoacán, aunque posteriormente se rechazó su transferencia.
Su abogado, Ignacio Mendoza, calificó el proceso, como la documentación evidente del “primer preso político” con pruebas de ello, y trazó una estrategia jurídica para demostrar que el ex comisionado, Alfredo Castillo, signó un acuerdo con las autodefensas en el que permitió permanecer armados y con escoltas a los líderes del movimiento. De manera que ello, demostró, según Mendoza Jiménez, que Castillo Cervantes violentó la Carta Magna, al solapar una acción ilegal, para la cual no poseía atribuciones.
Entre tanto, el ex líder de las autodefensas, permaneció interno, mientras su salud se mermaba, pues sufrió dos infartos durante su estadía en prisión, además de que las autoridades no le practicaron un estudio que requería para determinar la gravedad de la enfermedad cardíaca que padece.
Mireles y la política
Manuel Mireles Valencia, hijo del ex vocero de las autodefensas, reveló que el doctor militó 30 años en el PRI, por lo que no descartó que, a la salida de prisión, su padre se uniera a algún proyecto político, a alguna función dentro de la administración pública, ante varios ofrecimientos mediáticos que se han externado, como fue el caso del gobernador de Nuevo León, Jaime Rodríguez Calderón, “El Bronco”, quien admitió su interés por incorporar al ex líder autodefensa a su gabinete.
Sin embargo, no sería la primera vez que José Manuel Mireles Valverde se adentre al terreno de la política, pues militó 30 años en el PRI, y en el 2006, fue promovido por el ex gobernador, Leonel Godoy Rangel, como candidato del Sol Azteca, a una senaduría plurinominal, enlistado en el sitio 25.
Un año y medio después se adhirió al Partido Alternativa Socialdemócrata y fue candidato por la diputación local por el distrito de Coalcomán, en fórmula con su esposa, Ana Valencia Chávez, en la elección local del 7 de noviembre del 2007.
No obstante, después se le impidió contender debido a sus antecedentes, por lo que Mireles Valverde fue contratado en la Secretaría de Salud como asesor de asuntos internacionales, donde permaneció hasta 2011.
Mireles al fin libre
Esta tarde, el abogado Ignacio Mendoza recibió el resolutivo de la causa penal 137/2014, en la que se otorga la libertad provisional a Mireles Valverde, tras casi tres años de prisión.
El resolutivo emitido por el Juez Quinto de Distrito con Sede en Uruapan, Rubén Herrera Arreola, impone una fianza de 30 mil pesos, la firma periódica en el juzgado, no salir ni de la entidad ni del país, además de restringirle la comunicación con algunas personas, sobre las que no se específica de quienes se trata.
En estos momentos, el ex vocero de las autodefensas se encuentra realizando trámites para que su liberación del Cefereso de Tepic, Nayarit, se concrete en el transcurso de esta tarde- noche.