Morelia, Michoacán.-La ganadora del Oscar se abrió con Vanity Fair y habló sobre su vida después del tan publicitado divorcio con Brad Pitt, acerca de cómo sus seis hijos la han pasado con este episodio, así de cómo finalmente se hizo cargo de su salud.
Luego de que se confirmara su separación, la actriz de 42 años y sus hijos pasaron nueve meses viviendo en distintas casas. Pero ahora, tras la una histórica adquisición de una mansión en Los Ángeles, de 25 millones de dólares, las cosas comienzan a ponerse en su lugar.
“Han sido una época muy dura, y necesitábamos nuevos aires. Esta casa es un gran paso para todos nosotros, estamos tratando de hacer lo mejor para sanar como familia”.
La actriz más influyente de Hollywood no dio demasiados detalles sobre cómo lidió con su separación, pero explicó que las cosas estaban muy tensas desde antes de que decidiera poner fin a su matrimonio.
El verano pasado, durante la fase de post-producción de su película First They Killed My Father, relató, “las cosas se pusieron muy mal”.
Sin embargo, momentos después, aclaró: “No, no quiero usar esa palabra… Digamos que las cosas se tornaron ‘difíciles'”.
A pesar de los señalamientos de que el agitado estilo de vida de Brangelina detonaron que la familia se separara, la embajadora de buena voluntad de las Naciones Unidas dio su punto de vista, y para nada está de acuerdo.
“Nuestro estilo de vida no fue de ninguna manera negativo. Ése no fue el problema. Es y seguirá siendo una de las más maravillosas oportunidades que podemos darle a nuestros hijos… Ellos son seis inteligentes, reflexivos y luchadores individuos. Estoy muy orgullosa de ellos”, y especificó: “Son muy valientes en ese momento necesitaron serlo”.
“Todos estamos lidiando con estos eventos… Ellos no se ‘están curando’ del divorcio. Se están curando de la vida, de cosas que pasan en la vida”, puntualizó en la entrevista, sin embargo, reconoció que aún con su situación y su edad, comienza a sentir la necesidad de viajar y buscar nuevas aventuras.