Mientras Dios me la preste, haremos todo lo posible para que mi hija viva exclamó Anita Martínez Morales, madre de Ana Karen Pedro Martínez
Morelia, Michoacán.- Mientras Dios me la preste, haremos todo lo posible para que mi hija viva, porque no sabemos cuánto tiempo nos la va a prestar Dios o si se llega a salvar, exclamó Anita Martínez Morales, madre de Ana Karen Pedro Martínez.
Y es que la niña de 15 años tiene cáncer del tipo neuroectodérmico primitivo, uno de los más agresivos que existen y con pocas esperanzas de vida; por lo que su madre fue cómplice para que Karen, cumpliera su sueño de modelar vestidos de 15 años.
Fue entonces que Ana Karen, ataviada en un vestido verde con brillos tornasol, salió a dar su primera pasarela frente a un grupo de jóvenes que decidieron acompañarle en este día y que de manera particular, cada uno de ellos le obsequió una rosa.
Visiblemente emocionada, Ana Karen recibió sus flores y posó con ellas con la Catedral de Morelia como escenario. Casi no pronuncia palabras, se nota tímida y apenada y decide salir de la pasarela para cambiar su vestido.
En un segundo tiempo, Ana Karen sale más reluciente, enfundada en un vestido rosa y blanco; ya más en confianza se da tiempo para hacer la pasarela e incluso, enviar besos a sus admiradores, quienes le aplauden y le dicen cualquier cantidad de piropos.
Ana Karen entonces, decide quitarse la peluca y desfilar nuevamente, ahora, mostrando los estragos que la enfermedad que padece han dejado en ella. Sin pena, da tres vueltas al pasillo que dejaron para que posara lanza besos y se detiene…
“Quiero agradecer a todos los que están aquí y decirles que yo puedo luchar y voy a salir contra el cáncer”, dijo, Karen hace una pausa y continúa con la voz entrecortada “el cáncer no se pega, una persona no puede dejar de juntarse con ellas o hacerlas diferentes…”, y no habla más pues el llanto no se lo permite.
Se hace un momento de silencio y los asistentes la tranquilizan con aplausos, su mamá se acerca y la consuela, llora con ella, la abraza y cesan los aplausos.
Ana Karen, nuevamente hace una pasarela y se despide, se le ve feliz, radiante y con la esperanza de su recuperación a pesar de lo difícil que para ella, ha sido enfrentar el cáncer durante dos años.
Es importante mencionar que fue el diseñador José Luis Ortega quien prestó los vestidos para Ana Karen cumpliera su sueño. El Campanario Café las instalaciones y la Asociación Manitas la encargada de organizar todo.
Como último favor, Ana Karen solicitó a quien pueda y desee apoyarla, donar sangre en el Centro Estatal de Transfusión Sanguínea y el Laboratorio Estatal de Salud Pública, pues cada que sube a tratamiento requiere de una transfusión. El único requisito es dar el nombre completo: Ana Karen Pedro Martínez y se acepta cualquier tipo de sangre.