Durante su conferencia matutina el 4 de julio, el presidente Andrés Manuel López Obrador declaró haber sido el promotor del nearshoring en México. Según él, fue durante las negociaciones del T-MEC que México propuso esta estrategia. López Obrador expresó:
“Nosotros propusimos el nearshoring, la relocalización de empresas”.
El presidente explicó que la idea de nearshoring fue un esfuerzo de su administración desde sus inicios, con el fin de disminuir la dependencia de la economía global en China y modificar el balance de poder comercial. “Estaba creciendo mucho China, era demasiada la dependencia”, comentó, subrayando la importancia de diversificar las relaciones comerciales y consolidar la economía de la región.
Además, López Obrador sugirió la posibilidad de unificar América para contrarrestar el poderío económico y comercial de China, proponiendo una integración económica y comercial parecida a la Unión Europea. Este enfoque, según él, ayudaría a balancear las relaciones comerciales y evitar conflictos bélicos o comerciales.
El denominado Plan México busca la integración económica y comercial de todo el continente americano a mediano plazo, fortaleciendo las economías locales y minimizando la dependencia de influencias externas mediante la explotación de recursos naturales, la tecnología avanzada y una fuerza laboral joven.
Es importante destacar que la práctica de nearshoring no es exclusiva de esta administración. Por ejemplo, Whirlpool trasladó parte de sus operaciones a México en 1987, donde la planta mexicana exportó el 80% de su producción a Estados Unidos y Canadá. Posteriormente, otras compañías de electrónica, como Samsung y LG, también han implementado con éxito el nearshoring en México.