Descubre la tradición de los amarres de amor en el Mercado Sonora y su rol en la cultura esotérica mexicana.
México es un crisol de tradiciones y entre ellas resalta una que genera tanto fascinación como controversia: los amarres de amor. Especialmente en fechas señaladas como el Día de San Valentín, estos rituales experimentan un auge en popularidad.
En el corazón de la Ciudad de México, el Mercado Sonora se erige como un epicentro de prácticas esotéricas, entre las que se encuentran los amarres de amor. Durante un recorrido por este mercado, se descubre la peculiaridad de estos hechizos y su importancia en la localidad.
Servicios para el amor
“Isa”, autoproclamada bruja, ofrece sus servicios en este lugar y señala que los amarres de amor son especialmente solicitados el 14 de febrero para atraer o resolver conflictos amorosos. Según Isa, tanto hombres como mujeres acuden en busca de sus hechizos, utilizando inciensos, veladoras y feromonas para dejar una esencia distintiva en la persona deseada.
Además, Isa revela que estos rituales también pueden llevarse a cabo con yerbas y perfumes.
Por otro lado, “Karyna”, otra practicante de estos rituales, detalla que para un amarre se pueden usar dos figuras vudú que simbolizan al solicitante y a su ser amado. El proceso incluye una fotografía del objetivo, su fecha de nacimiento, signo zodiacal y un claro entendimiento de los objetivos del amarre, que varían desde el amor hasta el dominio.
“En un amarre de amor tienes que tener buena actitud, buenos pensamientos, y hacerlo con mucha fe. Ha venido mucha gente muy escéptica conmigo y terminan regresando”, afirma Karyna.
Rituales esotéricos
Carlos García Lara, académico de la Universidad de Guadalajara, indica que los rituales esotéricos como los amarres de amor son frecuentemente buscados para mejorar la suerte en el amor. Los amarres tienen como meta que la persona encuentre amor, deseo sexual o fortalezca su relación actual.
Lara enfatiza que los amarres de amor son considerados magia blanca, orientados a promover energías positivas. Especifica que el propósito no es forzar el amor, ya que eso no sería amor verdadero.
Es importante destacar que, aunque no es una práctica generalizada, algunos rituales esotéricos utilizan colibríes, lo que ha contribuido a la amenaza de extinción de esta especie.
La SEMARNAT recuerda que el colibrí es una especie protegida desde hace más de dos décadas.