El pasado día 13 de marzo de 2018, se publicó en el Diario Oficial de la Federación el “Acuerdo por el que se da a conocer a los gobiernos de las entidades federativas la distribución y calendarización para la ministración durante el ejercicio fiscal 2018, de los recursos correspondientes al Fondo de Aportaciones Múltiples en sus componentes de Infraestructura Educativa Básica, Media Superior y Superior”.
Con este instrumento de coordinación, se establece el calendario por el cual se distribuyen y calendariza la ministración de recursos federales (participaciones) a los gobiernos estatales para el desarrollo y fortalecimiento de la infraestructura educativa en Estados y Municipios. Se trata de un aspecto fundamental para que el gobierno federal apoye a los gobiernos locales.
Al respecto, de los 12,740 MDP que se destinarán durante el 2018 a la construcción de escuelas, laboratorios e infraestructura educativa en general (aulas, canchas, baños, oficinas, talleres, aulas múltiples o remodelación de la existente), se destaca que sumando los recursos relativos a la infraestructura educativa básica, media superior y superior, la entidad federativa del Estado de México se lleva la mayor tajada del pastel, con 1,070 MDP de los recursos a repartir, es decir, el 8.4% del total. Es decir, que a la entidad de donde es oriundo el Presidente de la República se le dan más recursos que a 5 entidades federativas, como son Baja California Sur, Querétaro, Zacatecas, Tlaxcala y Colima, que suman, todas ellas tan solo el 7.8%, lo cual hace reflexionar en cómo y por qué se distribuyen los recursos públicos de esta forma.
Asimismo, si analizamos, con mayor nivel de análisis, 10 entidades federativas suman, en conjunto, el 48.8% del total de recursos, las cuales son el Estado de México, Chiapas, Puebla, Oaxaca, Veracruz, Jalisco, Guanajuato, Quintana Roo, Michoacán y Guerrero. Mientras que, en el resto de entidades federativas (22), se distribuye el otro 51.2%; lo que da un promedio de distribución de recursos del 2.4%, lo cual sólo se cumple con 1 entidad (Nayarit) mientras que 20 están por encima de ese promedio y 10 por debajo.
De este análisis, se destaca que en materia de recursos para infraestructura educativa superior, la Ciudad de México no recibió recursos específicos, los cuales, se destinaron, por parte de los legisladores, a los presupuestos de las grandes escuelas mexicanas como la UNAM, el IPN y la UAM cuya presencia se concentra principalmente en la zona metropolitana.
En otras palabras, los pocos recursos no se distribuyen de la misma forma, como se indica en la tabla siguiente:
Al respecto, uno de los puntos que la contienda electoral debe de cubrir en los próximos meses es el planteamiento y propuestas de los aspirantes a la Presidencia de la República respecto a cómo lograr una mejor distribución de los recursos públicos para apoyar la educación en nuestro país. No sólo basta prometer un mayor nivel de gasto público con relación al Producto Interno Bruto (PIB), sino en una mejor calidad del gasto público en la materia.
Cabe señalar que, México ha aumentado los recursos destinados a educación con respecto al PIB, pasando del 4.4% en el 2000, al 5,2% en 2012 y al 5.4% en el 2014, conforme a datos de la Organización para la Cooperación Económica y el Desarrollo (OCDE), pero según el Reporte de Capital Humano 2016 del Foro Económico Mundial sólo el 21% de los mexicanos de 24 a 34 años poseen un título universitario y tan sólo 16 de cada 1000 jóvenes (aproximadamente el 1%) podrán llegar a ser profesionistas. Las cifras son alarmantes. Por ello, al ser la educación, el ascensor social natural, se debe de abordar en el debate de las ideas y las propuestas, de las estrategias, planteamientos y alternativas que cada aspirante presidencial tiene al respecto.
Aquí sólo planteó las preguntas básicas en cuanto a cómo lograr una mejor distribución de las transferencias federales para Estados y Municipios, lo que indudablemente obligar a responder además de ello aspectos, por mencionar algunos, tales como: cuál es el tipo de educación que se espera; cómo promover esquemas más exitosos en la educación pública de calidad; cómo se vislumbra el papel de la educación para responder a la dinámica del desarrollo económico nacional y a su inserción en la planta productiva local o regional; cómo apoya la educación en la cohesión del tejido social y en plantear alternativas al crimen organizado y la delincuencia; y, cuáles son las metas iniciales de arranque que se proponen para mejorar la efectividad y calidad educativa en México. Un tema apasionante, pero que debe ser un eje en las próximas discusiones.
Para concluir, me resulta ocioso que en las últimas 2 semanas no se habla del video de la “niña bien” que promueve el voto de López al estilo de reggaetón burlándose de la iglesia; de si 3 de los posibles candidatos independientes, todos incurrieron en firmas “inconsistentes” o “irregulares” o “falsas”, unos más que otros (incluyendo a la ex primera dama de Calderón a quien, por cierto, si se le otorgó el registro por parte de la autoridad electoral); si Meade se la pasan hablando de honestidad y de combate a la corrupción cuando no quiere darse cuenta que el partido que lo cobija es el que tiene más casos de ex gobernadores procesados por sus abusos y notorios casos de malversación de recursos públicos, enriquecimientos ilícitos o asociación con el crimen orgaizado; si Anaya tiene o no responsabilidad de la compra de una bodega, que fue un tema entre particulares, pero al tratarse por parte de la PGR como un tema prioritario de lavado de dinero, al que le dieron celeridad desmedida (mientras que le dan vueltas y vueltas a la desaparición de los jóvenes de Ayotzinapan), sólo han hecho que cada vez creamos menos en nuestras instituciones y en un uso faccioso en contra de un candidato que representa el cambio inteligente; o, si López ya amenazó, leyendo entre líneas, con soltar al tigre si no gana las próximas elecciones.
¿Para cuándo las propuestas? Es mucho pedir, que volteemos a aspectos tan esenciales, como exigir que haya un compromiso firme y público por la educación en nuestro país de quienes aspiran a gobernar durante los próximos seis años. Un compromiso traducido en posibles acciones concretas que le den esperanza a millones de niños y jóvenes, por acceder a una educación de calidad.
Ernesto Navarro.
Fuente:
http://dof.gob.mx/nota_detalle.php?codigo=5515848&fecha=13/03/2018
https://expansion.mx/economia/2015/11/24/mexico-reprueba-en-inversion-educativa-ante-la-ocde
http://www.sinembargo.mx/12-09-2017/3305980
http://www.excelsior.com.mx/nacional/2017/09/12/1187770
http://ibero.mx/prensa/mexico-estancado-en-porcentaje-del-pib-que-destina-investigacion-y-desarrollo