Ciudad de México.-Un comportamiento de aislamiento social, autodestructivo, hostil, impulsivo e irritante, así como relaciones interpersonales inestables, son algunos de los síntomas que presentan las personas que sufren de Trastorno Límite de la Personalidad, patología mental más frecuente dentro del grupo de los trastornos de la personalidad.
Además, el 85 por ciento de los pacientes con este trastorno, padecen otra enfermedad psiquiátrica, como ansiedad, depresión y problemas de conducta alimentaria.
Así lo informó el especialista de los Servicios de Atención Psiquiátrica (SAP), Gustavo Martos Alvidrez, quien detalló que los síntomas se pueden presentar desde la infancia, sin embargo, muchas veces se confunden con otras alteraciones, por lo que se diagnostica alrededor de los 20 años de edad.
Destacó que es común que estos pacientes desarrollen un patrón de dependencia en sus relaciones personales, por lo que siempre tratarán de evitar el abandono.
Manifiestan un constante vacío interior y soledad, así como cambios de estado de ánimo, como consecuencia de la dificultad que tienen para regular sus emociones.
El especialista precisó que otro de los rasgos comunes es la adopción de conductas de riesgo, como manejar de forma temeraria, consumir algún tipo de droga, relaciones sexuales sin protección y problemas alimentarios, inclusive en muchos casos intentan quitarse la vida.
Entre los factores de riesgo que detonan el TLP, se encuentran las situaciones de abandono durante la infancia, abuso físico, emocional o sexual, o bien la convivencia en un ambiente de violencia, pobreza y delincuencia.
Martos Alvidrez mencionó que en México no se cuenta con datos sobre su prevalencia, pero estudios internacionales muestran que a nivel mundial, el 6 por ciento de la población presenta este trastorno.
Debido a la comorbilidad psiquiátrica que conlleva el TLP el paciente debe recibir tratamiento multidisciplinario, con psicólogo y psiquiatra. A fin de combinar la psicoterapia, que permita al paciente mejorar sus relaciones interpersonales y el uso de medicamentos necesarios para controlar los síntomas de ansiedad, depresión e impulsividad.
Finalmente, destacó que la terapia dialéctico conductual es una de las psicoterapias que mejores resultados han mostrado en las personas con este tipo de trastorno.