1. Evita la obesidad
Un estudio realizado por Paul Thompson, investigador de la Universidad de California, apunta que la obesidad puede reducir el tamaño del cerebro en los ancianos, haciéndolos más vulnerables a la demencia.
2. Lee a Kafka
Leer a Franz Kafka, por ejemplo la historia de Un médico rural, estimula nuestras neuronas y “nos incita a aprender nuevos patrones cerebrales, a desarrollar una mayor capacidad de aprendizaje”, según un reciente estudio de la Universidad British Columbia y la Universidad de California.
3. Mejor en pareja
Estar casado o vivir en pareja reduce el riesgo de sufrir demencia y Alzheimer al envejecer en un 50 por ciento, según revela un estudio realizado por científicos suizos y finlandeses y publicado en la prestigiosa revista British Medical Journal.
4. Entrénate para la multitarea
La capacidad de hacer varias cosas a la vez de forma eficiente está “limitada por la velocidad a la que nuestra corteza prefrontal procesa la información”, asegura Paul E. Duz, investigador de la Universidad de Vanderbilt y coautor del estudio. La buena noticia es que esa capacidad se puede entrenar.
5. Apaga la televisión
Investigadores de la Universidad de Pensilvania han comprobado que ver la televisión antes de dormir suele generar deudas de sueño, que aumentan el riesgo de caer enfermos.
6. Medita
Si queremos desarrollar músculos más grandes y huesos más fuertes existen cientos de ejercicios y suplementos dietéticos que nos ayudan a lograr nuestro objetivo. ¿Pero qué sucede si lo que pretendemos es aumentar el tamaño de nuestro cerebro? Científicos de la Universidad de California (UCLA) demostraron la pasada primavera que también es posible recurriendo a la meditación.
7. Únete a un grupo
Un equipo de futbol, un club de lectura, una banda de rock,… Formar parte de un grupo social puede reducir el riesgo de sufrir infarto y demencia, según demostraban hace poco investigadores de las universidades australianas de Exeter y Queensland.
8. Haz garabatos
Llenar un papel de garabatos no es una pérdida de tiempo ni una distracción. Al contrario, favorece la concentración mental y estimula la memoria, según un estudio de la Universidad de Plymouth publicado en la revista Applied Cognitive Psychology.
Para más noticias dale Me Gusta a nuestra página